En su afán por recuperar la vida en el centro, El Puerto se enfrenta a un nuevo reto: conseguir visitantes de larga duración. Esta nueva misión no es nueva. De hecho, ya lleva muchos años apareciendo en la lista de promesas electorales o dentro de los cajones en los despachos de la Administración. Por el momento, nadie ha conseguido que durante los meses de invierno la vida en la ciudad- concretamente en el centro- se mantenga.

Ahora, recientemente, se está hablando de la nueva residencia de Erasmus que se ha proyectado en la calle Santo Domingo (justo en el número 31), en el edificio donde hace dos décadas se encontraba la antigua sede de Bienestar Social. Sin embargo, y a pesar de que no se conozca lo suficiente, algunos particulares ya han conseguido trabajar en esa línea de acogimiento.

Ese es el caso de Lola Ribero y César Jiménez, un matrimonio que han decidido abrir las puertas de su casa completamente al arte contemporáneo. Esta intención se ha concretado en Casa de Indias un centro, inaugurado el pasado mes de mayo, donde este matrimonio -aparte de exhibir su colección privada de 65 piezas- cede gratuitamente el espacio a los artistas para exhibir sus obras. No obstante, lo mejor del tema no queda ahí, ya que este matrimonio también ofrece la posibilidad de que cuatro artistas residan en este mismo centro durante dos meses - cediendo también un lugar de trabajo- para que puedan desarrollar e investigar su obra.

Lola Campos atendiendo a las explicaciones de la artista Dea Gómez.

“Casa de Indias tiene todos los ingredientes necesarios para convertirse en un punto de encuentro  de referencia a nivel nacional para albergar artistas de vanguardia”, ha declarado Lola Campos, concejala de Cultura, quien ya ha visitado varias veces el centro. “Es importante dar a conocer a los portuenses, y por supuesto a todas aquellas personas que nos visitan, este proyecto que debería convertirse en visita obligada”.

Ya se sabe lo que pasa en este tipo de ambientes. Un artista convive con otro, que si un café, una charla, las ideas comienzan a fluir y... ¡voilá!, sin apenas darse cuenta ha surgido un nuevo proyecto. Desde mayo, fecha en la que se inauguró, hasta hoy, ya han pasado por la residencia los cuatro primeros artistas: Dr. Crea, Los Bravú, Salim Malla y Uxue Ruiz de Arkaute. Por su parte, ellos tan sólo han tenido que preocuparse que los gastos del viaje, de su manutención.

Esta iniciativa sitúa a la ciudad al mismo nivel de Madrid, Barcelona, Cordóba o Murcia.

En concreto -y obviamente sin olvidar ni desmerecer al resto de propuestas- este es el plato fuerte del proyecto ya que, por el momento, no hay ninguna otra residencia de artistas en toda la provincia que ofrezca esta posibilidad. Por este mismo motivo, la Concejalía de Cultura ha mostrado un gran interés en esta idea y ya está buscando fórmulas de colaboración con el centro para impulsar el arte contemporáneo en la ciudad. “Se puede decir que los trabajos con los técnicos ya han empezado”, explica Lola Campos. “El principal objetivo es encontrar alguna línea que permita trabajar de forma conjunta y aprovechar el hecho de tener este sitio emblemático”.

Y muy bien que están haciendo. Muy tontos e inconscientes deberían ser en esta Concejalía si dejan pasar esta oportunidad (al igual que ha ocurrido con otros tantos proyectos muy monos que vieron la luz en la ciudad y se terminaron trasladando a otros enclaves).

Gracias a esta idea El Puerto consigue situarse -o al menos eso intenta- a la misma altura de otras ciudades como Barcelona, Madrid, Almería, Córdoba o Murcia donde esta idea lleva ya varias décadas desarrollándose. En este caso, la Residencia de Estudiantes de Madrid sería una de las más antiguas. En concreto este centro abrió sus puertas en 1910. Desde entonces por ella han pasado distintos artistas de todos los ámbitos, como Buñuel, Lorca, Dalí, Unamuno o Juan Ramón Jiménez. Mucho más actual es la fundación Antonio Gala, en Córdoba, donde el escritor ofrece la posibilidad de desarrollarse artísticamente a jóvenes entre 18 y 25 años bajo el lema Ponme como un sello en el corazón. Por ella han pasado figuras que despuntan en el panorama artístico como Guillermo Mora, Cristina Morales (recientemente premiada con el Premio Nacional de Literatura) o la también escritora Aixa de la Cruz.