El Puerto

Balbo, por amor al teatro

  • La compañía de teatro celebra los reconocimientos que le han sido otorgados tanto a nivel nacional como provincial por el trabajo realizado en su obra 'Rudens'

Paco Crespo nos espera en la puerta del instituto Santo Domingo con muchas historias que contar. Dentro, en la dirección del centro, se encuentra Emilio Flor quien saluda y sonríe como quien espera a un amigo. Eligen el patio interior para comenzar las historias que hablan de la compañía de teatro Balbo y de todo lo que por sus manos ha pasado.

Teatro Balbo es una asociación cultural que trabaja, estudia y representa obras grecolatinas, tanto da si son tragedias como si hablan de comedia. Ayudados por los cuatro pilares base de esta compañía, Sara Nanpéh, José Pecho, Emilio Flor y Paco Crespo, los jóvenes actores de entre 15 y 21 años representan las obras en los teatros de España ante auditorios llenos de público joven.

Poco a poco Emilio se remonta a los inicios, a sus años universitarios, a su cátedra de latín "en aquellos tiempos", al pueblo de Marchena, a cuando pasó por el Muñoz Seca, a cómo asume la dirección que nadie quiere del instituto Santo Domingo, a los jóvenes que han pasado por lo que hoy es Balbo y a cómo surge realmente la compañía de teatro.

Siendo profesor de latín, recurre al teatro y a la representación de las obras como un recurso didáctico para llegar a sus alumnos. Van pasando por sus manos aprendiendo las historias y queriendo el teatro. Este es el objetivo todo el trabajo que día a día desde hace ya 37 años ha marcado la vida tanto de alumnos como de profesores que en algún momento han sido actores. "Aquí se aprende teatro, historia, vocabulario y valores como el compromiso y la responsabilidad", dice. Y es que, para formar parte de la compañía no solo hace falta talento, pues el compromiso y la constancia son muy importantes para llevar a cabo el trabajo.

Interviene entonces Paco Crespo contando cosas de antaño y comparando inevitablemente con la suerte que corren en el presente. "Antes el vestuario eran cuatro telas malas atadas con una cuerda a la cintura, ¡y ya eras un esclavo por ejemplo! Si te tocaba ser de los ricos, una tela roja echada por encima te hacía subir de estatus". Las telas, la organización, las técnicas, la cantidad de gente, las obras o el tiempo son aspectos que han logrado mejorar con el paso de los años.

Hoy las cosas han cambiado. Paco habla de "la madurez de Balbo", de la organización, del compromiso, de la responsabilidad y de la seriedad. Han logrado hacerse un hueco en el mundo del teatro grecolatino, en cuanto a compañías de jóvenes actores se refiere. Además sus actuaciones son reclamadas desde toda la península. Ciudades como Barcelona, Tarragona o Bilbao solicitan la presencia de estos jóvenes en sus escenarios para aprender con ellos sobre la cultura clásica.

Todo ello lo han logrado gracias al grupo de profesionales que forman a los jóvenes como son José y Sara, ambos licenciados en la mejor escuela de arte dramático de España. Juntos enseñan las técnicas a los noveles actores para proyectar la voz o mantener a raya el miedo escénico ante un auditorio lleno. Y es que, según Paco, "alzarte con firmeza ante un público que te mira fijamente hace que por dentro crezcas". Mientras habla abre los brazos, mueve la cabeza a modo de reverencia y culmina este gesto con un sencillo "ole".

El trabajo y el esfuerzo son premiados y reconocidos a nivel provincial por la Fundación Coca - Cola en escenografía y vestuario en los 'Premios Buero' por su obra Rudens. "Ahora las telas son buenas y podemos pagarlas con lo que cobramos en las actuaciones. Que no cobramos nosotros, nos pagan los desplazamientos y alguna retribución que invertimos en decorado y vestuario", se explica Paco.

También a nivel nacional y por la misma obra han sido premiados con el primer premio del VI Concurso Nacional de grupos de Teatro Clásico Grecolatino de Segóbriga organizado por el Ministerio de Educación en este caso.

Paco sonríe mientras habla de la evolución de Balbo, de sus inicios con Emilio y de los proyectos que tienen de futuro. El amor por el teatro y los jóvenes los han llevado hasta donde están. Juntos se despiden hasta la próxima puesta en escena, en Cádiz los esperan.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios