Ecuador bajo cero

Qué pena de sábado. Las clasificatorias alcanzaron su ecuador con la peor sesión de lo que llevamos de Concurso en una noche tan gélida sobre las tablas como en el graderío. Solo el coro de Sevilla y la comparsa El gavilán rompieron la tendencia de una jornada mediocre y sin el brillo de las esperadas chirigotas de Algeciras y de Choza.

Mira que la función comenzó con buen pie. El coro de Sevilla, que se estrenaba en el Falla con Fali Pastrana Lorenzo como autor y Miguel 'el Tron' a los mandos, sorprendió con un buen repertorio y especialmente con un grupo potentísimo. Con un conjunto de voces a la altura de muy pocos, buena música y margen de mejora en letra, echan más madera a una modalidad que este año cuenta con una competencia terrible. Pueden ser una de las revelaciones de este COAC 2013.

Después de una sorpresa, dos pequeñas decepciones. Se confiaba en las chirigotas de Algeciras y de Miguel Choza para salvar una función sobre el papel bastante floja pero ninguna respondió a las espectativas. Simpáticas, sí, con detalles, sí, pero lejos de lo que fueron De nuevo en el mercado el año pasado y Los creadores S.A. en 2011. A destacar el popurrí de los primeros y los pasodobles de los segundos.

Por suerte para los aficionados que aguantaban el tipo en un Falla, un grupo de veteranos regresó de su retiro para enseñarles lo que es la elegancia hecha comparsa. El gavilán de Faly Pastrana, Paco Rosado y parte del grupo que fuera de Villegas encantó al público con un estilo clásico, con el sabor añejo de las noches de piropos, de radio y de finales hasta el amanecer. Una comparsa comparsa, de las de antes, que fue un puro placer escuchar y que dejó con ganas de más. El clima de añoranza se mantuvo hasta el final, más aún con el homenaje en forma de tipo que la comparsa de Camas presentó sobre las tablas y que acompañó con un digno repertorio. Con el recuerdo de Charrúas, Entre rejas, La ventolera o las más recientes Araka la kana o Los Santos de vuelta a la vida se llegó al final de una sesión que no pasó de mediocre.