Después de 34 años participando en agrupaciones del Concurso del Falla, Antonio Procopio ha decidido hacer un alto en el camino. No estará en el Carnaval 2023 con su coro subido en una batea, pero mantendrá su trabajo al frente de la Asociación de Coristas Gaditanos (Ascoga), al que llegó en 2012 sustituyendo en el cargo a Paco Martínez Mora. “Son muchos años ya. Ha sido una decisión muy meditada junto a mi familia”, señala Procopio. El tan atípico Carnaval 2022 le ha supuesto un doble quebradero de cabeza y quiere marcharse “con el quinto puesto de 'Carrera Oficial', que no es mal colofón”.

Dice que le ha costado mucho sacar este año el coro “de la nada”, después de separarse de su anterior proyecto, el del grupo que Miguel Ángel García Argüez 'Chapa' ha llevado al Falla bajo el nombre de 'Tierra y libertad'. Ahora, Procopio se quiere dedicar por entero “a las actividades de Ascoga y dinamizar la Casa del Corista”, abriendo este espacio a “cualquier asociación que nos lo solicite”. Como presidente de Ascoga le queda un año de mandato hasta las próximas elecciones, que se celebrarán en junio de 2023.

Tras el Carnaval 2022, el balance del representante de los coros tiene “luces y sombras”, siendo mejor el segundo fin de semana con respecto al primero “cuando aumentó el público en las calles”. Considera que ya el viernes se acertó con el traslado del carrusel del Paseo Marítimo a la Plaza, a causa del fuerte viento, y que tanto la Batalla de Coros de La Viña el segundo sábado como el carrusel en la Plaza del Domingo de Piñata “fueron un gran éxito”.

De cara al Carnaval 2023 Procopio augura una “enorme” participación de los coros, destacando que a los grupos que han estado en el COAC 2022 se unirán los regresos de Los Niños y Julio Pardo. “También quieren estar los coros de El Puerto, que ya iba a concursar este año pero al final no pudo, y uno de Ceuta, que sería una novedad”, expone. Procopio habla además de una posible vuelta de los coros de Martínez Mora y José Manuel Valdés, “y de otro que podría estar formando Felipe Marín en Puerto Real”. “Nos podríamos poner en 20 coros de adultos más los dos juveniles que regresarían”, añade.

Antonio Procopio comenzó saliendo en el coro 'Los chupatintas' en 1980. Luego formó parte de comparsas como 'Charanga', de Luis Ripoll, en 1983, volviendo al tango en 1985 con 'La banda municipal', primer premio. Luego estuvo en coros como 'La torcida' (1988), 'Barrio chino' (1990) o 'Guanahaní' (1992). O junto a Juan Antonio Lamas dirigiendo coros finalistas como 'El ventorrillo del Chato' (1999), 'Calle Nueva' (2000) o 'El balneario de La Palma' (2001). También fue componente de grupos de Pastrana y Zamora como 'El pájaro verde' (2003), 'Los entendíos del racataplán' (2004), 'Los siete' (2005) y 'La conga santiaguera' (2006). En 2012 comenzó su andadura como letrista hasta la actualidad.