Congestión en la salida

Podría decirse que los fichajes que han llegado al Cádiz hasta el momento son de perfil bajo. Jugadores que vienen de Segunda B en la mayoría de los casos y con sueldos no excesivamente altos. La apuesta es por futbolistas que lleguen con ilusión por hacerse un hueco en el escaparate del fútbol nacional, pero es posible que algunos de los que estén por llegar obliguen a realizar un esfuerzo en lo económico por ser jugadores contrastados en la categoría.

Pero para ello es fundamental que salgan algunos de los considerados transferibles por el club cadista, ya que son, en algunos casos, futbolistas con sueldos elevados. La realidad a día de hoy es que el Cádiz va a tener un serio problema para encontrar acomodo a la mayoría de los futbolistas con los que no cuenta Javi Gracia porque la mayoría ni siquiera se plantea cambiar de aires y los que no lo descartan no encuentran, por el momento, un destino que sea interesante para ellos.

Es el caso, por ejemplo, de Juanma Delgado. Su agente, Bartolomé Sánchez, comentaba la pasada semana que no tiene la menor intención de buscarse equipo y niega lo afirmado por Julio Peguero sobre que el directivo deportivo y el jugador mantuvieron una conversación hace pocos días en la que el técnico le dio tres posibilidades para encontrar una salida satisfactoria para todas las partes. Tiene previsto incorporarse a la pretemporada con el resto de sus compañeros.

La predisposición de David García es bastante mejor, pero no se va a marchar a cualquier precio. Ha estado en conversaciones con el Salamanca, pero no alcanzó un acuerdo económico y ahora ve difícil que puede salir. "El Salamanca me hizo una oferta que considero insuficiente, después han fichado otros jugadores para ese puesto y creo que esa opción está descartada. Hablé con el míster antes de irme de vacaciones y me dijo que no le molestaría en absoluto que trabajara con el equipo porque mi comportamiento había sido muy bueno en toda la temporada. Tengo un año más de contrato y estoy muy tranquilo".

El caso de Bezares es diferente porque su nombre se asocia al de muchos equipos que estarían interesados por él. Rumores aparte, lo cierto es que el OFI Creta ha pedido oficialmente al Cádiz su cesión por un año más, pero el club amarillo aún no ha respondido. El de Guadiaro, inicialmente, quiere esperar a que le salga alguna opción en España antes de volver a salir al extranjero, y menos si se trata de un equipo de Segunda. Tiene buen cartel y no parece complicado que encuentre equipo.

Lo mismo sucede con Rubiato, que ya llamó la atención de varios clubes de Segunda A esta misma campaña. En cualquier caso, según se comenta desde la empresa Bahía Internacional, que le representa, las ofertas que ha recibido son de Segunda B y como le quedan dos años de contrato con el Cádiz, por el momento es seguro que comenzará la pretemporada con el equipo cadista. Si le sale algo interesante más adelante, lo estudiaría.

Parri estaba a la espera hace algunos días de hablar directamente con Julio Peguero. Ha manifestado a través de su representante su intención de bajarse el sueldo para hacerse un hueco en los planes de Javi Gracia, pero el director deportivo amarillo ha dejado muy claro que no volverá a vestir la camiseta cadista. El objetivo es encontrarle acomodo en otro equipo porque difícilmente será posible llegar a un acuerdo económico para liquidar el tiempo de contrato que le resta.

Estos cinco jugadores suman una cantidad importante que debe pagar el Cádiz y es prioritario que salgan, pero no va a resultar sencillo. Diferentes pueden ser las situaciones de Álvaro, Lucas y Jesús, que tampoco son del agrado de Gracia para la próxima campaña. El agente del extremo espera hablar pronto con Peguero para estudiar la posibilidad de que quede libre, liquidando el año que le queda por delante, mientras que Jesús y Lucas no encuentran, por el momento, opciones en el mercado que les interesen.