Anelka, expulsado de su selección

El delantero del Chelsea abandonó la concentración gala tras insultar a Raymond Domenech · Francia es un polvorín y Gourcuff también ha tenido roces con varios compañeros, como Gallas con la prensa

Anelka, en el aeropuerto George, cerca de Ciudad del Cabo.
Anelka, en el aeropuerto George, cerca de Ciudad del Cabo.
Emilio Rappold / Knysna

20 de junio 2010 - 05:02

El delantero francés Nicolas Anelka fue expulsado de la selección de su país tras negarse a pedir disculpas por los duros insultos que dirigió al técnico, Raymond Domenech, confirmó ayer la Federación de Fútbol Francesa.

El jugador del Chelsea llamó al parecer "hijo de puta" a su entrenador en el descanso del partido que Francia perdió por 2-0 frente a México.

Al enterarse de lo ocurrido, "el presidente de la federación, Jean-Pierre Escalettes, pidió a Nicolas Anelka, en presencia del capitán Patrice Evra, que presentara una disculpa oficial al público francés y retirara sus palabras ante Raymond Domenech, el equipo y los 23 jugadores", señala el comunicado oficial.

"Ante la negativa del jugador a presentar unas disculpas públicas, (Escalettes) tomó la decisión de excluir a Nicolas Anelka del equipo, en completo acuerdo con el entrenador y los miembros de la delegación oficial".

El público francés y autoridades del país habían expresado su rechazo a las crudas palabras de Anelka, publicadas ayer en el diario deportivo francés L'Equipe.

"Que te den por el culo, sucio hijo de puta", dijo el jugador al técnico en el vestuario, asegura el diario en base a lo relatado por sus enviados a la ciudad de Knysa. Anelka respondía así a los reproches de Domenech por la posición que había ocupado en el campo durante el primer tiempo.

"Ok, sales (del campo)", fue la seca reacción del técnico. En el segundo tiempo, el delantero fue reemplazado por Gignac.

La derrota ante México deja a Francia con un pie fuera del Mundial después del empate a cero en su debut contra Uruguay.

La crisis de Anelka, sin embargo, no es la única que mantuvo en vilo al equipo. Tras el mismo partido ante México, el defensa del Arsenal Gallas mostró al parecer su dedo mayor a un periodista de televisión y ahora se niega a hablar con los medios. Su enfado reside, presuntamente, en que Evra sea capitán.

También Gourcuff está enfrentado a varios jugadores y según los comentaristas es ésa la razón por la que no juega de titular, como querría el técnico.

Todo estos roces quedaron ahora ensombrecidos por el escándalo de Anelka.

"No fueron exactamente las palabras citadas por L'Equipe, pero hubo insultos", dijo el periodista Arnaud Ramsay, autor de una biografía del jugador y amigo suyo. "Como muchos otros jugadores de la selección, no respeta en absoluto a Domenech".

Los seis años del técnico al frente de la selección estuvieron plagados de controversias. Pero también Anelka dejó a sus espaldas un largo historial de conflictos a su paso por Francia, Turquía e Inglaterra.

"Estos arrebatos son repugnantes. Anelka no puede volver a vestir la camiseta de la selección", dijo el ex entrenador francés Michel Hidalgo. También la ministra de Deporte Roselyn Bachelot subrayó que ni siquiera la presión que afronta un deportista de elite justifica incidentes como estos.

"Se le tendría que haber prohibido entrenar el viernes", dijo Christian Teinturier, funcionario de la federación francesa. "Debió haberse disculpado o ser expulsado".

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