Blogueros con el Papa

10 de octubre 2013 - 09:05

Me encantan los católicos modernos, las cofradías con facebook y tuiter, las tiendas capillas con página web, el Papa colocando un tuit y todas esas cosas. Es casi un oxímoron en sí mismo: una entidad con rituales medievales basada en la irracionalidad y que usa medios de última generación. Pero no quería hoy criticar sino apoyar envervorizadamente la tarea de esa curiosa asociación Blogueros con el Papa que se dedica, dicen, a apoyar incondicionalmente al Sumo Pontífice(perdón, Tamara, por las mayúsculas). Sea cual sea el Papa, claro. Los comprendo y les apoyo porque a mí me pasa lo mismo con el Cholo Simeone y con Diego Costa: hagan lo que hagan, digan lo que digan, me parece bien. Es lo más cerca que estoy de una religión así que comprendo en lo que consiste la fe. Bienvenidos a Cádiz y me ofrezco para lo que sea menester. Por su parte ayer los de la peña perpetraron el mamarracho ese de Dos Pasiones (Semana Santa y Carnaval) con lo que consiguieron, sin proponérselo y de un solo tiro, matar dos pájaros. Es tal el delirio del punto de partida que hace un destrozo a todos pero, supongo, de manera especial al capilleo, que es tan estirado y le gusta tanto el formalismo. Me pasa muchas vecesque vea a un torero con chistera, a un cateto con smoking o a un ceporro con chaqué y recuerdo aquel adagio reaccionario: no hay nada peor que un pobre jarto de pan, dicho con mucho perdón. Ajolá me perdonen, que los católicos ponen la otra mejilla.Qué tiempos aquellos en que la cofradía del Narareno expulsó a Martínez Ares por cantar al Papa. Eso por no hablar de la demanda interpuesta por un hermano que, según denuncia él mismo, fue vilipendiado. Estos romanos están todos locos, que decía Obelix.

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