La ciudad de Chiclana se ha volcado este año más que nunca con la Hermandad del Rocío. Unos 400 rocieros chiclaneros, casi el doble que en ediciones anteriores, hacen este año el camino hacia Almonte. Este martes embarcaron en Bajo de Guía hacia Doñana.

"Han sido dos años muy duros y había muchas ganas", explicó el presidente del Consejo de Hermandades de Chiclana, Antonio González. El itinerario es el mismo que en anteriores ediciones y la carreta ha incorporado algunas mejoras trabajadas por los rocieros durante la pausa por la pandemia.

Como viene siendo habitual, el lunes se celebró la Misa de Romeros en la Iglesia de San Telmo para, a continuación, llevar a cabo salida del Simpecado por las principales calles de Chiclana, abarrotadas para acompañar a la Hermandad del Rocío. "Había más gente que nunca en las calles y esto muestra que El Rocío cala en Chiclana cada vez más", apunta González.

El alcalde, José María Román, ha acompañado a los rocieros en el camino, y destacó la "emoción a flor de piel, los nervios y la ilusión" de todos. "Es un inmenso honor acompañar a la Hermandad del Rocío y a todos sus hermanos y hermanas en este 2022 en su camino hacia la aldea", expresó.

La Hermandad del Rocío de Chiclana es la que más peregrinos lleva en el embarque en Bajo de Guía de este martes. Este miércoles será el turno de otras hermandades aún más destacadas, como la de Sanlúcar o El Puerto.