Socios y familiares de usuarios del Centro de Participación Activa de Mayores San Antonio, uno de los más populares y de mayor arraigo del municipio, se manifestaron recientemente como consecuencia de la situación que atraviesa este espacio, dependiente de la Junta de Andalucía.

Su presidente, Agustín Sojo, ha explicado que el problema se concentra en que se carece de cafetería y hay falta de personal. Respecto a la primera cuestión, ha comentado que, desde hace seis meses que finalizó el contrato de la empresa concesionaria con la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familia e Igualdad, no se ha renovado este, muy importante para los mayores de la zona, a pesar de que en numerosas ocasiones se han puesto en contacto con representantes de este organismo autonómico con objeto de solventar este asunto.

Acerca de ello, Agustín Sojo ha detallado que la ausencia de este servicio dejó sin almuerzo a numerosos mayores de la zona. “Su precio era de 3,5 euros, por lo que muchas personas con pensiones no contributivas acudían aquí para comer o bien para llevarse el almuerzo a su domicilio”.  Parte de este problema se ha solventado, “gracias al Ayuntamiento de Chiclana, que nos puso en contacto con la Olla Solidaria”.

Asimismo, ha afirmado que ha detectado una menor presencia de socios y visitantes a esta cafetería, cuyo funcionamiento “echamos mucho de menos, porque este espacio es el centro neurálgico de la vida social del centro, por el que pasan diariamente aproximadamente 400 personas”. Y agrega: “No hay ni agua, tenemos que cogerla de los servicios”.

A este asunto, se añade la falta de personal del centro. Así que, tal y como denuncia su presidente, desde hace dos años, se carece de conserje y director, de tal manera que “el otro conserje y la asistenta social se han hecho cargo de estas labores”. Esto provoca que este permanezca cerrado los sábados, “un hecho que no se había producido nunca, que yo recuerde”, ha apuntado Agustín Sojo.

Sin embargo, ante estas adversidades, el presidente de la entidad no tira la toalla y advierte que, si la Junta de Andalucía persiste en su actitud y no obtienen una respuesta clara al respecto, “tras la Semana Santa, continuaremos con las concentraciones”.