Los pueblos blancos de Cádiz son su gran seña de identidad. Sus calles empedradas entre sus casas blancas, la alegría de sus lugareños y su ubicación en pleno corazón de la Sierra de Cádiz hacen de los pueblos gaditanos un lugar mágico. Encontramos en la falda de la Sierra de Líjar, entre los ríos Guadalete y Guadalporcún, el encantador pueblo de Algodonales. Entre sus calles blancas resaltan los naranjos y el murmullo de las doce fuentes que atesora este pueblo gaditano.

Os proponemos un sendero a través de las doce fuentes, para que podáis descubrir los distintos ángulos de Algodonales. Estas fuentes se construyeron en el siglo XIX y se distribuyen por distintas partes del casco urbano. En la Calle Fuente se encuentra la del Algarrobo y los Lavaderos y en Avenida Fuente Alta la que lleva su nombre. El resto de fuentes son Fuente Baja, de Cristóbal Gómez, Manantial de Los Dornajos, Cabrera, Orihuela y de las Víboras. 

Fuente del Algarrobo

Según la Guía Repsol, este sendero comienza cerca de la Fuente del Algarrobo, conocida también como Fuente baja; y termina cerca de la Fuente Alta. El sendero, denominado Las Fuentes, gusta mucho porque es fácil de realizar y, además de ser muy cómodo, cuenta con unas vistas panorámicas impresionantes de Algodonales.

Cruzaremos por un pinar de pino piñonero donde encontraremos algarrobos y encinas. Estas fechas son ideales para realizar esta ruta ya que con la lluvia que cae en la Sierra se filtra entre las piedras y crea grietas y surcos que se exterioriza en forma de manantiales. Como hemos mencionado anteriormente, el sendero comienza cerca de la Fuente Baja en dirección hacia la Virgencita y por un camino cómodo con vistas hacia Zahara y el Parque Natural de Grazalema.

Un total de doce fuentes atesora Algodonales, siendo la más famosa la del Algarrobo. Este camino entre la del inicio y la del final te permitirá conocer los mejores rincones de este mágico pueblo y las vistas desde él. No dejes pasar la oportunidad y descubre Algodonales de una manera acuática.