Los últimos serán los primeros. Es lo que le puede suceder al Cádiz con la llegada de los refuerzos invernales, que desde un primer momento están demostrando que no vienen a rellenar y que su participación puede ser importante. El 4 de enero se abrió la puerta a los fichajes y la entrada de estos en la convocatoria y en el once no se ha hecho esperar hasta el punto de que el pasado domingo en la alineación cadista figuraban tres de los cuatro refuerzos que se han oficializado hasta el momento.

Al contrario de lo que ha pasado en anteriores temporadas, los nuevos de diciembre vienen a hacer ruido, a ganarse un sitio desde el primer día y a conducir al Cádiz, en unión de los que siguen desde el verano, al objetivo del ascenso. A medida que han ido llegando los efectivos procedentes de otros equipos y se han producido las bajas, Claudio Barragán ha demostrado que confía en los recién aterrizados, jugadores que tienen un perfil muy parecido en cuanto a experiencia, edad y trayectoria. Y es que el técnico está demostrando claramente que necesita tablas para que el equipo no se arrugue en la fase regular ni en el play-off.

David Sánchez fue el primero en llegar a la plantilla y a la vuelta de las vacaciones de Navidad, el lunes día 28 de diciembre, estaba ya trabajando con sus nuevos compañeros y prácticamente una semana después estaba en el once titular en el partido de ida ante el Celta, en el que disputó los 90 minutos.

El siguiente en recalar en el proyecto amarillo fue Jandro, procedente del desaparecido Huracán Valencia. El mediapunta jugó hace dos jornadas contra el Recreativo de Huelva; es decir, poco después de ponerse a las órdenes de Claudio Barragán. Repitió en Vigo, en Copa, y en Cartagena, en Liga, en ambos casos jugando desde el inicio y parece que va camino de ser una pieza fija en el esquema del entrenador.

El tercero en unirse al conjunto gaditano ha sido Migue González. Procedente también del Huracán, el central ya fue titular el pasado fin de semana en el estadio Cartagonova, por delante de un Josete que sigue en muchas quinielas para tener que abandonar el plantel antes de final de mes. La pareja de zagueros compuesta por Aridane y Migue dio buen resultado en Cartagena. Por su eficacia, talla y contundencia está llamado a mantenerse en el once, por lo que la otra plaza la tendrán que pelear el resto de defensores.

El cuarto futbolista que ha firmado por el Cádiz es Ranko Despotovic. Un delantero con amplio recorrido e internacional por Serbia que estaba sin equipo, pero que está forzando de lo lindo desde un primer momento para entrar en la rueda de los disponibles. En el cuerpo técnico cadista causa sorpresa la excelente predisposición del delantero balcánico, que desde su llegada quiere ganar tiempo al tiempo para ser cuanto antes una alternativa real y fiable a sus dos competidores, Dani Güiza y Lolo Plá.