Cádiz CF

El día que el Cádiz volvió a nacer

  • Hoy se cumple un año de la subasta a la que acudió Carlos Medina para que Locos por el Balón comprara el club y evitara una desaparición cantada.

Hace exactamente un año, a las 09:25 horas, Carlos Medina Lapieza, entraba en la Notaria de Carlos Cabrera. Faltaban 5 minutos para que se celebrara la subasta pública del 49,5% de acciones del Cádiz CF SAD, en propiedad del ex presidente Antonio Muñoz Vera. Unos minutos antes habían accedido, al portal de la calle Aurelio Sellé, los tres administradores concursales. Veinte minutos más tarde, el periodista y director de Línea 6 salía del notario, tras firmar la adquisición del paquete accionarial. Nadie se lo creía. Ni propios ni extraños y mucho menos el grupo de periodistas, redactores gráficos y cámaras de televisión que llevaban una hora haciendo guardia en la calle. Locos por el Balón ya estaba en el Cádiz.

Tras seis meses de estar en primera plana, dando la cara, amortiguando golpes traicioneros, solucionando problemas y realizando una gestión -un día se valorará justamente su dedicación- que, sin duda, volvió a ilusionar a la afición al dar un golpe de timón a un barco totalmente a la deriva, Carlos Medina, voluntariamente, dio un paso al costado y entró en escena Manuel Vizcaíno que, a la postre, sería el presidente, tras el amago de nombrar a Juan José Pina lo que, casi con toda seguridad, hubiera conllevado otro toque de atención del Consejo Superior de Deportes.

Un año después, Diario de Cádiz recuerda, con su principal protagonista, aquellos seis meses y la actualidad cadista hoy día. Carlos Medina, como dijo y cumplió, no está ni en el Consejo ni en el organigrama del club, pero a nadie escapa que es una persona muy cercana a Locos por el Balón y al propio Cádiz, y la mayoría del aficionado continúa confiando en su palabra y criterios, considerándole un hombre clave en la salvación del auténtico submarino amarillo.

Sin embargo el proceso de la compra del paquete del 49,5 % de las acciones del Cádiz fue algo que Locos por el Balón gestionó durante meses: "Hubo muchas reuniones porque la situación no era nada fácil. El día del Pacto de Antequera (21 septiembre) prácticamente arrojé la toalla. Antonio Muñoz me advirtió que iba a ir a la reunión con Gaucci para hablar. Le comenté que no firmase nada y, sin embargo, lo hizo", recuerda. Al periodista le convencieron Quique Pina, Manuel Vizcaíno, Juan Carlos Cordero y Fran Canal: "Éste último acertó todo lo de Sinergy. Cada vez que decían que iban a cumplir o a pagar algo: cheques, pagarés sin fondo, aseguradora Asco, el mismo Pacto de Antequera... etc. Fran siempre mantuvo que no cumplirían nada". Medina -que fue quien puso en contacto a Canal con Pina y Vizcaíno- se mantuvo en la negociación a dos bandas entre Muñoz y Locos por el Balón, sabiendo además lo que trajinaban los italianos.

"La semana anterior a la subasta, Vizcaíno llamó para preguntarme si estaba dispuesto a ir a la notaría y, por supuesto, dije que sí porque, además, ya sabía que Muñoz se estaba reuniendo con Luis Oliver y Florentino Manzano, estudiando la propuesta del primero para adquirir las acciones. También el cordobés tenía otra oferta superior económicamente, pero él quería que fuese la familia Pina la que colaborase con el Cádiz porque era quien más confianza le inspiraba por su anterior gestión deportiva y por el cariño que le profesa al cadismo".

El periodista aclara que siempre pensó que su gestión sería de unos días, pero después se alargó en demasía: "Se produjeron demasiados contratiempos. Hubo muchas piedras en el camino de gente que quisieron torpedear el proyecto. En esos momentos, Vizcaíno siempre me animó y estuvo optimista". Los italianos se mantuvieron en sus trece y amenazaron con demandas, dijeron que llegaría dinero para pagar a los jugadores, que los Locos había programado un golpe de estado…

"Las últimas ofertas de Gaucci y compañía a Muñoz fueron irrisorias: 100.000 euros en efectivo y 350.000 en plazos. Otra, distribuir en una aerolínea italiana el aceite Capricho Andaluz, una finca rústica en Córdoba para Muñoz... etc. Lamentablemente hubo gente de Cádiz que apoyó a los italianos hasta que no tuvieron más remedio que aceptar a Locos por el Balón. Olvidaron que Gaucci habían dejado más de 2 millones de euros de deuda, que la jueza le había quitado al Consejo de Sinergy las facultades patrimoniales, que los jugadores y el personal no cobraban, que el chalé, el móvil y el coche de Gaucci los pagaba el Cádiz... etc.".

Respecto a qué momento fue el más complejo en el proceso, afirma que fue cuando el CSD negó la autorización de la entrada de Locos por el Balón (18 febrero): "Nuestra respuesta fue tajante. Se anunció el pago inmediato de una nómina a los jugadores, la incorporación de Jorge López y un 2x1 en las entradas del partido Cádiz-Albacete. Mientras, Gaucci y los que le apoyaban hablaban de reconquista, nosotros seguíamos gestionando, pagando a jugadores y potenciando la asistencia al estadio, además de tratar de poner orden en un club donde imperaba el caos".

"Recuerdo que Gaucci me llamó un día desde Italia proponiéndome que me daba lo que quisiera, si abandonaba y les dejaba a ellos en el club. Ni se le contestó. Locos por el Balón se mantuvo en su proyecto". En su momento, también informó de una oferta millonaria que hubo de un grupo alemán que estaba muy interesado en entrar en el Cádiz… "Y lo sigue estando porque así me lo transmiten, pero el proyecto que lidera Vizcaíno es imparable. Ya se le dijo que no y no hay ninguna novedad al respecto. Es un grupo germano de reconocida solvencia en el fútbol europeo y que conoce Cádiz por los equipos alemanes que vienen a Sancti Petri".

Carlos Medina cumplió su palabra de no estar en el Consejo ni en el organigrama del club, lo que se confirmó el 21 de julio, día en el que se celebró la Junta General de Accionistas: "Sé que muchos no me creyeron y pensaron que seguiría. Pero yo cumplí la misión encomendada y tengo que agradecer -como lo he hecho, siempre que he podido- a Manuel Vizcaíno y Locos por el Balón que me concedieran semejante privilegio de ayudar y colaborar con el Cádiz; cosa que, por supuesto, sigo haciendo desde Línea 6 y con la revista ¡Ese Cádiz…Oé!.

Amigo personal de Quique Pina, al que ve asiduamente en Carranza, le considera "un cadista más que sufre y se emociona con el Cádiz…". Sobre el presidente, Manuel Vizcaíno, está seguro que llevará al Cádiz donde él quiere: "A Primera División. Está cumpliendo todo lo que prometió y dice, por lo que no hay por qué dudar de su proyecto".

Varapalo a los escépticos: "Me parece lamentable y vergonzoso que aquí haya personas recordando continuamente cuestiones pasadas con tal de manchar el nombre de la gente que viene a ayudar al Cádiz, que se juega su patrimonio y su tiempo. Hasta los administradores concursales, a los que agradezco también su colaboración, admitieron, en una reunión con el personal del club y también en un informe por escrito, que al Cádiz sólo lo salvó, de su liquidación y disolución, la llegada de Locos por el Balón".

Respecto al futuro de la entidad, el periodista considera que se han sentado las bases para la organización en todos los aspectos y mucho más en la solución del tema económico ya que se asumió una deuda brutal: "Como el otro día comentó la jueza María del Castillo Mendaro, al Concurso de Acreedores le puede quedar dos meses y eso es gracias a la gestión de Vizcaíno, Fran Canal y el Consejo de Administración".

Retomando algo del pasado, de esa etapa de transición, Carlos Medina fue criticado cuando, antes del partido Cádiz-Hospitalet, anuló pases de favor y rebajó notablemente la cantidad de credenciales: "En aquel momento hice lo que tenía que hacer; no me arrepiento aunque no descarto que me equivocase en algo, como humano que soy. Lo que pedí lo cumplieron la mayoría: 5 euros para ayudar al Cádiz. Siempre lo consulté todo y creo que aporté mi granito de arena en devolver la ilusión al cadismo".

El director de Línea 6 se muestra totalmente de acuerdo en la designación de Juan José Pina, como presidente de honor y respecto al tema deportivo lo tiene claro: "Ante el Lucena se vio algo nuevo en el equipo. Pienso que todos los cambios que sirvan para mejorar y aumentar las posibilidades de lograr el objetivo son buenos y necesarios. Y aquí al que venga a ayudar y a aportar cosas positivas hay que darle la bienvenida y las gracias porque, insisto una vez más, el Cádiz estuvo en un tris de desaparecer".

Carlos Medina insistió en esta cuestión. "Parece que algunos o no lo saben o no quieren saberlo. Los que más hablan son indocumentados que nada o muy poco han hecho por el club durante muchos años. Incluso algunos han intentado torpedear el proyecto de Locos por el Balón. Critican todo, no dan soluciones y, encima, se alegran de las derrotas. Por todo ello, en el Cádiz hacen falta, tras las experiencias vividas, más hechos que palabras".

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