Tiempo de cambio de rumbo

Nadie hubiera imaginado hace tres meses que la decimocuarta jornada del campeonato de Liga iba a deparar la aparición en escena de un protagonista inesperado en el Cádiz, que comparece hoy en el Municipal de San Pablo para medirse a un Écija que cotiza al alza (a partir de las cinco de la tarde). El encuentro está marcado por el sorpresivo regreso de Ramón Blanco al banquillo del conjunto amarillo. El gallego con nacionalidad gaditana vivirá hoy el primer partido de la que ya es su cuarta etapa como entrenador de la entidad centenaria en sustitución de Alberto Monteagudo, destituido el pasado martes tras el empate en el estadio Ramón de Carranza ante el modesto La Roda, que llegaba precedido de tres derrotas consecutivas (ante el Cacereño, el Arroyo y el Albacete).

La dinámica negativa de resultados acabó con la resistencia a prescindir del manchego por parte Alessandro Gaucci, que se vio abocado a buscar un revulsivo al frente del vestuario con el objetivo de propiciar una reacción que no admite más retrasos.

El dirigente italiano del club ha buscado en la experiencia de Ramón Blanco la solución a los males del Cádiz, atascado desde hace tres semanas en una preocupante undécima posición de la que le está costando escapar para intentar volver a mirar hacia arriba. El nuevo técnico ha trabajado toda la semana en los distintas facetas que rodean a un equipo de fútbol, pero ha hecho especial hincapié en levantar el ánimo de una plantilla alicaída y con la confianza extraviada.

Más allá de la novedad en el banquillo, lo que de verdad importa son los tres puntos que esta tarde se juega el Cádiz en la localidad sevillana. Cuatro jornadas seguidas sin saborear las mieles del triunfo son demasiadas para un equipo considerado como uno de los favoritos del grupo IV que, transcurrido un tercio de la competición, se halla más cerca del infierno que del cielo. Sobra un dedo de la mano para contar los cuatro puntos que separan a los amarillos del abismo del descenso, mientras que la fase de ascenso, sin estar demasiado lejos, queda a una distancia de seis puntos.

Ramón Blanco ha recibido el encargo de enderezar el rumbo y él lo tiene claro: el Cádiz debe salir a ganar en el campo del Écija, donde las dos últimas visitas de los gaditanos se saldaron con un empate y una derrota.

Pero ganar no es sinónimo de jugar con prisas. El 'míster' ha lanzado el mensaje de que el equipo tiene que huir de las garras de la ansiedad y afrontar con tranquilidad el duelo. El gallego confía en la capacidad de sus jugadores para saldar con éxito el reto inmediato de lograr un triunfo que devuelva un poco de calma al inquieto universo cadista.

Blanco ha dispuesto de pocos días para trabajar con la plantilla, pero cuenta con la ventaja de haber seguido numerosos entrenamientos como empleado de Onda Cádiz Televisión para tener una idea de cada jugador. Tendrá un once en la cabeza, aunque condicionado por los problemas físicos que sufren Indiano y Belencoso.

El encuentro presenta el aliciente añadido de saber cuál será la primera alineación de Ramón Blanco en su nueva aventura como entrenador del Cádiz, aunque la decisión está condicionada por las bajas de Indiano y Belencoso, que incluso podría hacer cambiar el rombo que el 'míster' pretendía establecer en la zona central.

La primera incógnita por resolver es quién será esta tarde el inquilino de la portería cadista. Bernabé le había arrebatado la titularidad a Aulestia en las últimas dos jornadas, aunque esta semana parten los dos de cero y las posibilidades están divididas al cincuenta por ciento.

En la defensa parecen que tienen su plaza asegurada Moke -lateral derecho- y Raúl Albentosa -central-, y queda por conocer los nombres de los ocuparán la otra posición en el eje y el costado izquierdo. Bermúdez y Tomás podría ser la apuesta de Blanco, aunque tampoco se pueden descartar otras opciones como las de Garrido o Domingo en el centro.

Edison Torres estará en la medular con Fall, y en las bandas Juan Villar será el inquilino de la derecha, mientras que Viyuela y Dieguito se disputan la izquierda. Pablo Sánchez y Adrián Gallardo -sustituto de Belencoso- serán los hombres más adelantados.