La Real Sociedad, rival del Cádiz CF este domingo próximo, tras la renovación esta semana hasta 2027 de Ander Barrenetxea, tiene atadas a todas sus futuras estrellas con contratos de larga duración que garantizan su columna vertebral entre el 2024 y 2027 y solo Miguel Ángel Moyá y Nacho Monreal terminan contrato en junio de este año.

Dos jugadores tienen una vinculación para los seis próximos años, algo inédito en San Sebastián. Uno de ellos es el sevillano Carlos Fernández y otro el internacional sub 21 Barrenetxea, mientras que otros cuatro firmaron hasta 2025: Mikel Merino, Martín Zubimendi, Martín Merquelanz y Roberto López.

La principal figura blanquiazul, el internacional Mikel Oyarzabal, por su parte, tiene asegurada la presencia en Zubieta en la presente campaña y otras tres temporadas más, al igual que sucede con Alex Isak, Portu, Le Normand, Igor Zubeldia, Aritz Elustondo, Andoni Gorosabel, Ander Guevara y Modibo Sagnan.

La Real solo tiene a dos jugadores con su futuro en el alero, Nacho Monreal y Miguel Ángel Moyá, libres ambos de negociar su futuro porque acaban contrato este verano, mientras que David Silva firmó hasta 2022, año en el que también finaliza la vinculación con Adnan Januzaj.

La lesión de menisco de Moyá y su paso por quirófano, por otro lado, no alterará en ningún caso la plantilla txuriurdin al no ser una baja de larga duración de más de cinco meses, que sería el requisito necesario para que los donostiarras pudieran incorporar un nuevo futbolista en las próximas semanas.

Con esta previsión de futuro, el equipo realista cierra su preparación a la espera del Cádiz CF, el enemigo a batir en el Reale Arena el domingo; un equipo donostiarra que busca con esta medida tener enchufado al grueso del grupo por lo que supone tener un contrato de larga duración.

Precisamente el extremo Ander Barrenetxea, que ha renovado su contrato hasta 2027, señaló este jueves que hasta ahora sólo "se han visto pinceladas" y no "todo mi potencial", por lo que espera poder seguir aportando a su equipo. "He tenido más minutos de juego y estoy respondiendo mejor. Además, la competitividad entre los compañeros ha aumentado y hay mucho nivel", señaló en una conferencia de prensa telemática el jugador guipuzcoano.

El futbolista más joven de la plantilla blanquiazul dijo también que no se la había pasado "en ningún momento por la cabeza la idea de salir cedido, porque entrenando también se aprende mucho". Habló de la situación de la Real tras una mala racha de resultados y aseguró que el vestuario "está tranquilo porque el juego está siendo bueno y se crean oportunidades, pero está faltando la suerte que deberíamos de tener, por lo que hay que seguir insistiendo ya que las victorias llegarán".