Máxima tensión en el Rayo Vallecano

El técnico del Rayo Vallecano, José Ramón Sandoval, negó ayer que haya agredido al futbolista venezolano Miku, aunque reconoció que su delantero cometió un acto de indisciplina al negarse a jugar.

Desde hace días se habla de un mal ambiente en el equipo madrileño, descendido a la segunda categoría del fútbol español la pasada temporada, y la Cadena Ser aseguró en la noche del jueves que Sandoval agredió a Miku durante el entrenamiento del domingo tras perder 3-0 ante el Almería.

Además, el medio afirmó que el entrenador también se enfrentó con el capitán del equipo, Roberto Trashorras, a quien acusó de ser uno de los responsables del descenso de categoría.

Jugadores y entrenador mantuvieron ayer una reunión privada y al finalizar Sandoval reconoció que hubo fricciones, pero negó que hubiera agredido a Miku. "Nunca le he agredido. Si hubiera sido así, me hubiera denunciado. Sólo se negó a jugar y yo se lo reproché. Hubo un calentón", afirmó el entrenador del equipo. Tanto Miku como Trashorras se marcharon de las instalaciones deportivas sin hacer declaraciones, por orden expresa del club.