Los trabajadores de las clínicas de diálisis Avericum en Cádiz denuncian el incumplimiento del convenio por parte de la empresa. En concreto, afirman que superan con creces las horas de trabajo sin que se les compense económicamente ni con días libres. Se trata de un problema que afecta especialmente al personal de enfermería y auxiliares de enfermería -unos 32 trabajadores entre las clínicas que Avericum tiene en la capital gaditana y Chiclana-.

Estos profesionales señalan que por convenio, tendrían que trabajar 1.635 horas al año; pero están haciendo 31 turnos de cinco horas y media mensuales, lo que suponen 1.800 horas al año. En la fecha actual, ya han superado las horas recogidas en el convenio.

La empresa Avericum comenzó a prestar sus servicios de diálisis a los pacientes de la provincia de Cádiz en mayo de 2019 y el personal de enfermería lleva desde noviembre de ese mismo año haciendo todos los mese entre dos y cuatro turnos más de trabajo de los que le corresponden. Aseguran que en mayo de 2020, remitieron un escrito al propietario de las clínicas, el abogado canario Javier Artiles Camacho, exponiéndoles su situación porque veían que iban acumulando horas de trabajo; a día de hoy no han recibido respuesta a este escrito, que iba firmado por todos los trabajadores afectados.

Los supervisores de la clínica y la subdirectora asistencial también se han dirigido al empresario para transmitirle la inquietud del personal de enfermería y auxiliares, y a esta última, Artiles le dijo que no se preocuparan porque iban a cobrar las horas trabajadas de más o compensarlas con días libres. Pero hasta ahora, no han conseguido ni una cosa ni la otra.

Algunos trabajadores pudieron hablar con Javier Artiles directamente cuando hizo una visita a las clínicas de Cádiz, y el empresario les dijo que a mediados de noviembre daría una solución a su situación. "Pero mediados de noviembre ha llegado ya y no tenemos ninguna noticia de él", lamentan algunos de estos profesionales, quienes aseguran que están ya "muy quemados".

Ante esta situación, la única solución que ven es denunciar al empresario ante los juzgados, pero temen perder sus puestos de trabajo si lo hacen.

Este periódico se ha puesto en contacto con Javier Artiles, quien se ha mostrado sorprendido por las quejas de sus empleados. Afirma que nunca ha tenido problemas con ningún trabajador, que en sus clínicas no se están haciendo horas de más y las que se van acumulando es "porque ellos quieren". Insiste en que él ha dado la opción de que elijan si prefieren que las horas extras se las paguen o las compensen con días libres, "porque si no, se estaría incumpliendo el convenio". Añade que está previsto que la situación se arregle antes de que finalice el año.

Los trabajadores no se fían de las palabras de Javier Artiles, ya que desde el principio dijo que siempre cumpliría el convenio y nunca iba a estar fuera de la legalidad, "algo que no ha cumplido".