-Cumplen diez años en Cádiz. ¿El balance es positivo?

-Le aseguro que estamos muy satisfechos. Una vez más se ha demostrado el carácter de ciudad abierta que tiene Cádiz, acogiéndonos no sólo con ilusión, sino con su tradicional crítica constructiva que, indudablemente, nos ha ayudado a posicionarnos y superar cualquier escollo que existiese en nuestro camino.

-¿Qué llevó a El Corte Inglés a abrir en Cádiz un centro comercial de la envergadura del Bahía de Cádiz, entonces uno de los mayores del sur de España, en una zona con un PIB muy limitado y con un elevado número de centros comerciales en las inmediaciones?

-La ilusión transmitida por parte de la ciudadanía y nuestro legítimo interés de crecimiento. Mire, cualquier estudio de mercado, efectivamente, diría lo que usted planteaba en su pregunta, pero siempre, se lo aseguro, hay algo más allá de las puras cifras y los datos de un sondeo, una encuesta, etc. Prioritario es el esfuerzo común por conseguir las metas del bienestar. Y esto es lo que más nos animó para venir a Cádiz.

-Respecto a la clientela gaditana, ¿qué le ha llamado más la atención?

-Cada ciudad, cada zona, cada provincia, tiene su idiosincrasia propia incluso en los hábitos de compra que nos podrían parecer más comunes. Nuestra experiencia nos dice que no hay que sorprenderse, sino adaptarse a los deseos y necesidades de los clientes. Así, por qué no decirlo, el equipo de dirección del Centro Bahía de Cádiz analiza a diario los resultados de la jornada anterior, junto con las sugerencias que aportan las personas que nos visitan, para reconducir cualquier error generalista en el que se haya podido caer: a veces, por ejemplo, un departamento "amanece" totalmente distinto a como era ayer.

-La crisis económica ha tocado de lleno al sector del comercio. ¿Qué incidencia ha tenido en el centro de El Corte Inglés de Cádiz? ¿Qué cambios se han introducido para salvar esta situación?

-La "previsión" y la "adaptación" son dos de las normas fundamentales que rigen este sector. Pero, además, y en nuestro caso, siempre hemos afirmado que "hay que estar por el cliente". Atención, calidad y servicio: aquí es donde más se ha profundizado, si es que cabía, reforzando las innegables ventajas del pago aplazado y destacando en nuestra oferta global lo que la demanda diaria nos reclamaba. Si quiere ejemplos concretos, le hablaría de la marca "Aliada" (en Hipercor), de los "Ocho días de oro" (en El Corte Inglés), o del desarrollo de la "Venta a distancia" en todo el Grupo.

-Cádiz intenta ser una ciudad volcada en el turismo y el comercio. ¿Considera El Corte Inglés esencial la apertura los domingos y festivos?

-Consideramos fundamental todo aquello que ayude al desarrollo económico de la ciudad y, por tanto, a la mejora de la situación actual.

A todos nos consta que Cádiz está haciendo un esfuerzo especial en el ámbito del turismo de cruceros (y yo añadiría "de calidad"), por lo que parece lógico preguntarse qué es lo que el Grupo El Corte Inglés puede aportar a este esfuerzo colectivo… Entiendo, pues, que descartar posibilidades a los que nos visitan es una manera de recortar los objetivos globales planteados. Lo que un turista no encuentre hoy, posiblemente no lo adquiera mañana, o no lo adquiera nunca.

La totalidad del comercio de la ciudad debe estar abierto, en una actitud de ofrecimiento constante de lo mejor y más interesante de sus estanterías. Lo contrario, no lo dude, es perder oportunidades de negocio, de expansión y de desarrollo laboral.

-¿La culminación de las obras del segundo puente sobre la Bahía se plantea como una infraestructura esencial para el desarrollo de este centro comercial?

-Para el desarrollo de la Bahía… Es una infraestructura más (para mí de los más importantes que se hayan realizado nunca) para acabar con el tradicional aislamiento de Cádiz, abriéndola hacia el interior, lo mismo que siempre estuvo abierta al mar.

-¿Considera que hay una sobrecarga de grandes superficies en el área Bahía de Cádiz-Jerez?

-La selección natural es algo que también existe en el comercio. Son los consumidores los que tienen la palabra. Como en el resto de las cosas, no hay que tener miedo a la liberalización, lo que hay que garantizar es el trabajo en condiciones igualitarias.

-Su empresa es patrocinadora de Cádiz 2012. ¿Cómo puede incidir este acontecimiento en el funcionamiento del centro? ¿Cuál va a ser su participación en el mismo?

-Desde el primer momento aceptamos la invitación de ser patrocinadores oficiales del acontecimiento. Entendimos que La Pepa no es sólo un conjunto de actividades festivas, sino una plataforma inmejorable para enseñar al mundo lo mejor de esta tierra en todos sus aspectos.

Estamos seguros de que, aparte de su eficacia en la imagen gaditana, traerá buenos vientos de desarrollo. Sus gestores están convencidos de ello, y nosotros pensamos que estas actitudes positivas son las que más necesitamos en estos tiempos.