Cádiz

La primera fase de la avenida transversal ya está abierta al tráfico

  • La siguiente fase es más complicada porque implica el derribo de dos edificios y la construcción de viviendas en el solar que deje la antigua casa-cuartel

La primera fase de la avenida transversal ya se encuentra abierta al tráfico desde el mediodía de ayer. Son 158 metros de longitud desde la calle Marqués de la Ensenada hasta la avenida Juan Carlos I.

La siguiente parte ya tardará más tiempo ya que es una operación mucho más compleja. El primer paso que habrá que dar será la demolición de la antigua casa-cuartel de la Guardia Civil. La alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, señaló ayer en la propia avenida de la Constitución de 1812, que así ha sido bautizada, que el Ayuntamiento se encuentra actualmente realizando el proyecto de demolición. Una vez que la Guardia Civil desaloje por completo las viviendas, ya que actualmente se está procediendo al traslado, se derribará este equipamiento.

Una vez que estén construidas las nuevas viviendas, habrá que realojar a los vecinos de los bloques que también se tendrán que demoler para abrir paso a la avenida que entroncará posteriormente con la de Huelva y con la rotonda del segundo puente.

Teófila Martínez insistió ayer mucho en la importancia de la apertura de esta vía que "está llamada a convertirse en el eje transversal principal de la ciudad".

La alcaldesa entiende que esta avenida puede servir también para que Varela y el mercado Virgen del Rosario se puedan revitalizar "y sirva para que aparezcan nuevos negocios en la zona".

La inversión total en esta avenida ha sido de un millón de euros y ha comprendido toda la urbanización y las redes de servicios subterráneos.

La regulación del tráfico se ha contemplado con semáforos en los cruces con la avenida Juan Carlos I, en García de Sola y en la calle Marqués de la Ensenada.

El proyecto de reurbanización ha creado zonas de tránsito peatonal longitudinal protegidas del tráfico rodado y pasos transversales de cruces en la calzada con rebaje de bordillos.

Asimismo, se ha dotado a la avenida de dos carriles en cada sentido de circulación y de una mediana separativa, creándose en los márgenes de la calzada estacionamientos en cordón. Asimismo, se han ubicado los contenedores de basura que permiten la recogida selectiva de residuos sólidos urbanos.

En la margen coincidente con la calle José Joaquín de Mora se ha habilitado un carril-bici con una vía en cada dirección que queda confinado y protegido por una doble alineación de palmeras de la variedad washingtonia.

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