Un contrato de las características del de limpieza y recogida de basuras de la ciudad en los tiempos actuales debe ir de la mano de las tecnologías. Por eso, en el pliego se establece la obligación de crear una plataforma de seguimiento on line del contrato. Esa plataforma tiene como objetivo que los supervisores del contrato tengan acceso a ella y comprueben el estado de cumplimiento del servicio.

En concreto, la plataforma informática deberá incluir información sobre la planificación operativa del servicio de baldeo, barrido, recogida de residuos, limpieza de pintadas u operaciones especiales, entre otros. Información de seguimiento dinámico mediante GPS de vehículos y maquinaria. Seguimiento de las pesadas y cantidades de residuos recogidas. Planimetría de los sectores de barrido y de baldeo. Inventario de contenedores y papeleras con geoposicionamiento. Indicencias del servicio. Un registro de entrega y reparto de los contenedores individuales (para el casco histórico). Registro diario de avisos de recogida de muebles. Quejas, reclamaciones y sugerencias ciudadanas.

Además, se pide que esta herramienta incluya información estadística sobre el servicio; tiempos de respuesta, número de incidencias, tiempo empleado en las rutas de recogida de residuos...

También contará la plataforma con información concreta sobre los actos y eventos que se celebren en la ciudad y la prestación del servicio en cada uno de ellos. Una relación de los puntos negros que existan (bien sea por ser lugares de pernoctación, zonas donde se acumulan excrementos de palomas, monumentos u otros que consideren los técnicos).

Esta plataforma debe estar operativa a los tres meses de formalizarse la adjudicación, y servirá también para contar con un contador de jornadas del personal, en función de sus turnos y sus ocupaciones.