Los locales de la tribuna del Estadio Carranza han salido a subasta por un precio inferior al coste que han tenido las obras de este equipamiento. En este sentido, según el pliego de condiciones administrativas que ha publicado el Ayuntamiento de Cádiz, el concurso se ha dividido en tres bloques que entre todos ellos tienen como precio de salida 20.769.660 euros sin aplicarle el IVA, que correría a cargo de la empresa que se quede cualquiera de los tres módulos, previsiblemente la Zona Franca. Sin embargo, la obra se adjudicó a FCC Construcciones en diciembre de 2009 por un valor de 22.931.091 euros sin IVA.

Esto quiere decir que son casi 2,2 millones menos que los que ha costado la obra, que ha estado financiada por el Ayuntamiento de Cádiz mediante un crédito a largo plazo que se pidió a varias entidades financieras por un valor de 37,8 millones de euros, que era el precio que se había estimado que podían tener los trabajos en un principio. En su día, el equipo de Gobierno dijo que es dinero restante se iba a destinar a otras inversiones.

Si se le aplica el IVA, el coste de los trabajos se fue por encima de los 26,6 millones de euros.

El equipo de Gobierno municipal firmó un convenio con el Consorcio de la Zona Franca por la que éste se comprometía a acudir al concurso con el mínimo tipo exigible para que en el caso de que se quede desierto, sea la empresa pública la que se haga con la propiedad a ese precio, tal y como ha ocurrido en las restantes gradas del Carranza.

El portavoz municipal del PSOE, Francisco González, señala que la obra del Estadio se ha vendido siempre "como que no iba a tener coste para los gaditanos y, sin embargo, ahora vemos que ha salido a subasta por un precio inferior al coste de las obras". Esto sólo podría remediarlo que hubiera numerosas ofertas que elevaran el precio inicial de salida de cada uno de los módulos, pero esta situación se antoja improbable: "De todos modos, la operación le va a costar dinero a los españoles porque la Zona Franca es una empresa pública".

El pliego de condiciones al que ha tenido acceso este periódico establece que el módulo uno, que es el que está destinado a garaje, sale a concurso por 3,9 millones de euros. Este tiene una superficie total construida de 8.536,30 metros cuadrados, divididos en dos plantas de sótano. La capacidad total del aparcamiento sería de 228 plazas. Precisamente la empresa FCC Construcciones mostró su compromiso de pujar por los mismos en el pliego de condiciones para hacerse con la obra, lo que le hizo conseguir algunos puntos con respecto a sus competidores.

El segundo módulo es el destinado al uso terciario, comercial y hospedaje con una superficie total construida de 17.218 metros cuadrados y que abarca espacios desde el sótano -2, el superior, las plantas bajas y primera para comedor y ya de la tercera a la séptima. El precio de salida de este módulo es de 9,8 millones de euros. Zona Franca está intentando encontrar inversores que quieran hacerse en el futuro con este equipamiento.

Por último, la tercera pata de esta subasta es el módulo destinado a uso terciario y comercial puramente, es decir, que vaya una gran superficie o algo parecido, según los planes iniciales que tiene la Zona Franca si se hace finalmente con los locales. La superficie total construida es de 6.381 metros cuadrados divididos entre las plantas baja y la primera. El precio de salida es de algo más de siete millones de euros.