La situación generada a raíz de la suspensión de la Semana Santa a consecuencia de la epidemia del coronavirus afectará de lleno también a otro sector que es vital en la ciudad y para la ciudad. Se trata de los hoteles, que según la presidenta de la Asociación de Empresas Turísticas y propietaria de Las Cortes, Josefa Díaz, se verán afectados “un 100%” esta Semana Santa. Es decir, que se quedan sin reservas para una época que es fundamental para ellos. No en vano, la Junta de Andalucía trasladó que el último año se contabilizaron en toda la comunidad más de un millón y medio de pernoctaciones entre el Miércoles Santo y el Domingo de Resurrección.

“Hasta ahora íbamos a tener más del 90% de afectación, y desde que el ministro ha anunciado que cierran las fronteras llegará al 100%”, indicaba ayer tarde (minutos después de la comparecencia pública de Grande-Marlaska), Josefa Díaz, en relación a la imposibilidad de que los extranjeros lleguen a Cádiz en las próximas fechas

Los hoteles gaditanos se encuentran en un contínuo proceso de cancelaciones de reservas y anulaciones de camas desde que el Estado comenzó a implantar medidas para luchar contra el coronavirus. Y precisamente Josefa Díaz se muestra crítica con la labor realizada por el ejecutivo de Pedro Sánchez, “porque se está haciendo todo con un protocolo muy lento”. “Todavía no sabemos las medidas que van a adoptar para nosotros”, añadía Díaz a la espera de conocer qué iba a aprobar el Gobierno para los autónomos y pequeños empresarios.

La situación en el sector, por tanto, es de especial incertidumbre estos días y de cara a un corto y medio plazo. “No sabemos si dar vacaciones al personal, la contratación eventual se ha paralizado por completo… Es una situación bastante crítica”, señala la presidenta de la Aetc.

A modo de ejemplo, Josefa Díaz indicaba cómo en el Hotel Las Cortes debía haber 36 habitaciones ocupadas, que de hecho estaban reservadas, “y hay seis”. Apenas media docena que además era de clientes que no podían regresar a sus destinos de origen por las restricciones del Gobierno. Una dura situación, sin duda, para un sector que en Cádiz, como señala Díaz, afecta en muchos casos a negocios hoteleros que gestionan pequeños empresarios.