La antigua fábrica de Altadis va llenándose de contenido poco a poco. Tras Friking y Alestis, la Zona Franca de Cádiz anunció ayer que un centro hospitalario de naturaleza privada se ubicará en uno de los edificios de la antigua tabaquera, después de que la Mesa de Contratación del Consorcio haya procedido a la adjudicación tras valorar la oferta presentada.

El nombre de la empresa de la clínica no ha trascendido aunque lo único que se conoce es que su capital es gaditano. Este centro hospitalario irá instalado concretamente en el denominado edificio de oficinas en cruz que albergaba las oficinas y la dirección de la antigua Altadis y tendrá una superficie total de más de 3.000 metros cuadrados.

Las instalaciones serán sometidas a una obra de adecuación ya que el edificio tiene unos 25 años de antigüedad y es necesario adaptarlo a las necesidades de la nueva empresa y a las prestaciones y calidad asistencial del centro sanitario.

Según ha informado la Zona Franca en un comunicado, el equipamiento albergará un moderno centro hospitalario que combinará la tecnología punta con la experiencia y la profesionalidad, con un amplio número de especialidades y distintas áreas. De hecho, el edificio tendrá zonas de consultas que incluyen áreas de diagnóstico específico para cada especialidad, contando con los últimos avances tecnológicos.

Con esta empresa ya son tres empresas las instaladas en los terrenos de la antigua tabaquera y que ya forman parte del recinto fiscal gaditano, que ha pasado de 330.000 a 486.881 metros cuadrados de superficie "con todas las ventajas aduaneras y fiscales inherentes a la Zona Franca".

La primera en ubicarse en la antigua Altadis fue Friking Design, dedicada a la producción de marca propia de ropa que comercializa a través de franquicias y que ocupa desde el pasado noviembre 2.305 metros cuadrados.

Este verano comenzará a funcionar en la denominada Planta de Preparación de Ligas (PPL) la empresa Alestis, de fabricación de componentes aeronáuticos, que ocupará 13.500 metros cuadrados y una parte del edificio de oficinas anexo.

La Zona Franca está teniendo que realizar numerosos trabajos previos para acondicionar todas las naves y estancias de Altadis, así como los cerramientos para integrarlo en el recinto fiscal.

Precisamente uno de los problemas a los que se enfrentaba el Consorcio es que todo tiene consideración de uso industrial pero a la hora de comercializarlos, el edificio de oficinas es complicado que tenga esa consideración. Por ello quería que todo el suelo de Altadis fuera como el del resto del recinto fiscal, con el epígrafe de actividades económicas.