A la espera del nuevo Rey

Como si de una baraja de naipes se tratara, una vez consumado el traspaso de la Corona de España tras la abdicación de Juan Carlos I comienza todo un proceso de cambios que afectan prácticamente a todos los niveles y ámbitos. El relevo en el Reinado del país no será tan ágil en paredes, calles, edificios institucionales y otros equipamientos como lo ha sido en la Zarzuela. ¿Pero cómo afectará a Cádiz la proclamación de un nuevo Rey de España?

La primera medida que se ha hecho visible en la ciudad a este respecto ha sido la retirada del cuadro de Juan Carlos I que presidía el Salón de Plenos del Ayuntamiento. Una pintura de grandes dimensiones que desde el pasado viernes ya no está expuesta al público. El teniente de alcalde responsable de Patrimonio, José Blas Fernández, explica que el pasado viernes se emitió una circular a todas las dependencias municipales "informando de que el anterior monarca ya no puede presidir ninguna de las estancias oficiales". Matiza Fernández que esos cuadros (pinturas o fotografías) sí pueden quedarse en las dependencias, "pero no ocupando el lugar central de las mismas".

En atención a esa circular, además de la pintura del Salón de Plenos se han retirado las de Alcaldía o la sala de Comisión de Gobierno, entre otras dependencias municipales.

Ahora, todas las administraciones del país están a la espera de que la Casa Real empiece a distribuir los modelos fotográficos del Rey Felipe VI, para a partir de ese momento encargar las pinturas o las fotografías necesarias y volver a ocupar los vacíos de todas esas paredes.

Sobre este respecto, se da un caso muy curioso. Y es que al Ayuntamiento ha llegado ya el ofrecimiento de un pintor, gaditano, para realizar el cuadro de Felipe VI que se necesite para el Salón de Plenos. Prácticamente, el ofrecimiento se recibió antes de la proclamación del nuevo rey.

El cambio de Rey también puede afectar de alguna forma al nomenclator de calles y edificios. En este caso, parece que por el momento no habrá modificación alguna en la ciudad. Dos vías son las principalmente señaladas sobre esta peculiaridad: Paseo Príncipe de Asturias y calle Infanta Leonor (que curiosamente, ambas se cruzan en el barrio de Astilleros). Sobre la primera vía, indican fuentes municipales que está dedicada al cargo, no a la persona, por lo que puede mantenerse. No está tan claro, sin embargo, que se mantenga el nombre de la calle dedicada en su día a la ya Princesa de Asturias. Otros casos, como el de la avenida Juan Carlos I o el Centro Cultural Reina Sofía, están fuera de toda duda que seguirán manteniendo los nombres.