Cádiz Abolicionista alerta de las mafias de la prostitución que operan en pisos turísticos y salas de masajes

"La ciudad de Cádiz se ha convertido en un entorno propicio para que operen mafias que sostienen el sistema prostitucional", denuncian de manera contundente desde el colectivo feminista Cádiz Abolicionista. "Desde hace tiempo alertamos de que la creciente masificación de la ciudad, el auge de la turistificación y la progresiva mercantilización del espacio urbano están favoreciendo el asentamiento de redes de explotación sexual", añaden.

A raíz de la noticia de la detección de una red de explotación sexual de mujeres a cargo supuestamente de un matrimonio de Cádiz y de un vecino de San Fernando en un piso del Paseo Marítimo que habría afectado al menos a 32 mujeres de origen colombiano, el colectivo feminista ha emitido un comunicado en el que advierten de que "la proliferación de la prostitución en lugares como salas de masajes, pisos turísticos y plataformas digitales es el resultado de la peligrosa permisividad institucional y de la falta de políticas centradas en los derechos de las mujeres".

“La reciente desarticulación de una red de explotación sexual en Cádiz confirma lo que desde Cádiz Abolicionista venimos señalando desde hace años: nuestra ciudad se ha convertido en un entorno propicio para que operen mafias que sostienen el sistema prostitucional. Esta realidad no es nueva, ni aislada. Es el resultado de una combinación peligrosa de permisividad institucional y ausencia de políticas públicas centradas en los derechos de las mujeres”, denuncian desde Cádiz Abolicionista.

“Desde hace tiempo alertamos de que la creciente masificación de la ciudad, el auge de la turistificación y la progresiva mercantilización del espacio urbano están favoreciendo el asentamiento de redes de explotación sexual. En este contexto, el sistema prostitucional no aparece como un fenómeno marginal, sino como parte de una lógica económica que tolera la violencia siempre que se disfrace de consumo o elección personal. Frente a este escenario, es urgente recuperar una mirada colectiva que ponga en el centro los derechos humanos y la dignidad de todas las mujeres”, añaden desde el colectivo.

Reconocimiento de mujeres explotadas como víctimas de violencia de género

“Al inicio de este mandato, presentamos dos propuestas muy concretas al Ayuntamiento: separar la Delegación de Igualdad y LGTBI, para que cada realidad política tenga su propio espacio de atención, y reconocer a las mujeres en situación de explotación sexual y víctimas de trata como víctimas de violencia de género dentro del servicio municipal Unidad Alerta. Eran medidas asumibles, perfectamente razonadas, y sin embargo, no hemos obtenido respuesta”, agregan desde Cádiz Abolicionista.

“Más allá de acciones simbólicas, lo cierto es que en Cádiz no existe hoy una política pública estructural frente al sistema prostitucional. Mientras tanto, los prostituidores y proxenetas actúan con total impunidad desde pisos turísticos, salones de masajes y plataformas digitales. Y lo hacen aquí, entre nosotras, sin que las instituciones miren hacia donde deben mirar”.

Un plan integral y campañas de concienciación

“Exigimos la puesta en marcha de un plan municipal integral contra la explotación sexual, dotado de presupuesto, personal formado, coordinación institucional e inspecciones reales. Necesitamos campañas de concienciación que no se limiten a lemas, sino que cuestionen de fondo los discursos que legitiman el sistema prostitucional como si fuera una opción libre”.

“Pertenecer a la Red de Municipios Libres de Trata no puede ser una medalla institucional vacía. O se traduce en políticas públicas valientes, o se convierte en pura retórica.”

“Cádiz merece más que silencio. Merece responsabilidad. Gobernar no es ocupar una silla, es tomar decisiones y asumir compromisos. Hoy, el Partido Popular tiene esa responsabilidad. Y cada día que pasa sin actuar, también está tomando partido”.

“Como feministas, creemos en una ciudad que no se construya sobre los cuerpos de mujeres explotadas. Una ciudad que piense en su futuro colectivo, no en el beneficio inmediato. Porque ninguna libertad es real si se sostiene sobre la opresión de otras. Y porque Cádiz, si quiere ser libre, tiene que ser también justa", concluyen.