La agrupación parroquial del Cautivo de San José queda disuelta

La agrupación parroquial del Cautivo establecida en San José ha cesado su actividad. El proyecto que estaba llamado por muchos a convertirse en una nueva hermandad de penitencia en el futuro no seguirá adelante, después de que el párroco de San José (que es, a su vez, el presidente de la agrupación parroquial en base al decreto emitido el pasado mes de febrero para regular el régimen de estos colectivos en la diócesis) haya decidido disolverla. El propio párroco, Salvador Rivera, lo confirmaba ayer tarde a este periódico, sin querer precisar los motivos que han llevado a esta situación.

Con esta noticia que saltó ayer se pone fin a un prometedora actividad cofrade en torno a la imagen del Cautivo que radica en la parroquia de extramuros. Fue hace ahora dos años cuando se presentó públicamente el entonces grupo de devotos del Cautivo, que llevaba tiempo cuajando la idea en el seno de San José y que ya esa Cuaresma de 2014 organizó los cultos a la imagen propuesta como titular. Sería a principios de este año cuando el Obispado elevaría este colectivo a la categoría de agrupación parroquial, lo que suponía -aparentemente- un escalón más en el camino de este grupo hasta convertirse en una hermandad de penitencia.

En estos más de dos años de trabajo en torno al Cautivo han sido varios los logros cosechados. Principalmente son visibles en el aspecto cultual, dotando a la imagen de un triduo en Cuaresma y de señalados cultos con motivo de la fiesta de Cristo Rey. Mención aparte merece la salida a la calle del pasado año 2015, en el paso de misterio de Siete Palabras, que supuso un visible logro refrendado esta pasada Cuaresma con la segunda salida (ya en una parihuela de dimensiones más pequeñas debido al ya citado decreto sobre las agrupaciones parroquiales). Además de esto, son varias las túnicas que se han confeccionado para la imagen, llegando la agrupación a contar con escudo corporativo e incluso con una bandera que estrenaron recientemente.

Aunque los motivos no han salido oficialmente a la luz, una comunicación interna a los miembros de la agrupación sí señalarían unos "acontecimientos producidos este fin de semana", donde la agrupación "sin previo aviso se reúne para informar extraoficialmente al resto del órgano rector de una decisión del párroco", que "tras consultas varias decide disolver el grupo por demostrar falta de confianza hacia el presidente y de no acatar la decisión que había tomado al respecto", según reza en esa comunicación interna.

En cualquier caso, se pone fin a este movimiento cofradiero que surgió hace más de dos años en torno al Cautivo de San José, cuyo proyecto de futura hermandad ha quedado descartado.