Los acusados del 'caso Afanas' pactan para evitar ir a la cárcel

La Justicia empieza a poner al fin a cada uno en su sitio en el 'caso Afanas', que estallara hace diez años al enzarzarse los principales responsables de la entidad en Cádiz en denuncias cruzadas de irregularidades contables.

Desestimada ya, primero en juzgado de primera instancia, y después, el pasado año por la Audiencia, la querella que el miembro de la junta rectora Fernando Álvarez Crespo y su yerno, Nicolás Silva Rodríguez, director de Administración y Servicios desde principios de 1997 hasta julio de 1999, interpusieron contra la ex directora general Lucía Zamora y el ex director del centro de Cádiz y ex concejal de Servicios Sociales del Ayuntamiento gaditano Francisco Villarreal, son finalmente los denunciantes, suegro y yerno, los que han resultado condenados.

Ambos, que fueron denunciados por Lucía Zamora, a quien despidieron tras poner en conocimiento de los responsables de Afanas importantes descuadres contables que detectó en las cuentas, han acabado pactando una sentencia de conformidad para evitar ir a la cárcel.

El fallo del Juzgado de lo Penal Número 4 de Cádiz, facilitado a este diario por el abogado del ex edil Villarreal, el gaditano José Luis Ortiz Miranda (que, junto al Partido Popular ha ejercido la acusación particular), les suspende la pena privativa de libertad durante dos años a ambos, y les condena a penas con las que eluden la cárcel.

A Juan Nicolás Silva Rodríguez, para quien el fiscal solicitaba más de cuatro años, a dos años de prisión y multa de seis meses, con una cuota diaria de 6 euros e inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante la condena, por dos delitos: uno de falsificación de la contabilidad y otro de apropiación indebida.

A su suegro, Fernando Álvarez Crespo, por su parte, se le condena a seis meses de prisión como autor de un delito de apropiación indebida, en relación con un delito de administración desleal.

Silva debe además indemnizar a Afanas en la cantidad de 3.061,56 euros. Y ello sin contar las cantidades de las que, según la sentencia, se apropió indebidamente, que elevan la cantidad total hasta unos 15.000 euros.

En el caso del ex director administrativo de Afanas, la suspensión de pena privativa de libertad queda condicionada a que abone el resto de la indemnización en el plazo de un mes.

En los hechos probados , la sentencia de este procedimiento que incoara el Ministerio Fiscal a instancias de la denuncia presentada por Lucía Zamora, apunta que Silva Rodríguez "abusando de su cargo, por cuanto era el encargado de la llevanza de la contabilidad de la asociación, procedió en perjuicio del patrimonio social" en diversas ocasiones durante los dos años y medio que estuvo en el cargo. Primero, durante el ejercicio de 1997, falsificó la contabilidad de Afanas, agrega el fallo, realizando anotaciones contables por valor superior a los gastos realizados, distrayendo en perjuicio de la misma 11.577,38 euros, cerca de dos millones de las antiguas pesetas.

"Con idéntico modus operandi" anota el fallo que procedió en el ejercicio de 1998. Y pese a que gran parte de la contabilidad no ha sido hallada, se ha probado que procedió a distraer de los fines sociales 597,41 euros tras hinchar diversas facturas.

Y por último, en 1999, dispuso de 410.000 pesetas de los fondos de la caja de la asociación falsificando la firma de los preceptores de servicios no prestados.

Fernando Álvarez, por su parte, realizaba obras en el chalé, en Chiclana, "y ordenó a los trabajadores del taller ocupacional de la asociación que le realizasen varios trabajos (una cancela, cinco rejas, alguna ventana y obras de fontanería) por 182.000 pesetas, utilizando para ello mano de obra y materiales de Afanas.

Sólo cuando se denunciaron los hechos abonó esa cantidad.