Varias generaciones de católicos no conocen el rito con el que a partir del 29 de noviembre se van a celebrar las misas en la capilla del Pópulo. Por eso, el presidente de Una Voce Cádiz considera que el que acuda se encontrará "con algo sustancialmente diferente".

En primer lugar, destaca que en el rito romano la misa se haga en latín, aunque en el caso de las lecturas es optativo (aunque en Cádiz está previsto que también se hagan en la lengua materna). El otro aspecto que más llama la atención es la posición del sacerdote, que oficia la misa de frente al altar -o de espaldas a los fieles-, además de que la mesa de la celebración se situa pegado a la pared y no en medio del altar mayor, como el rito actual.

Pero además de este hay otros aspectos que marca el rito romano. Comenzando por el sacerdote, Juan Antonio Segovia comenta que con esta forma de celebrar misa se recupera el amito (prenda de lienzo fino, con una cruz en medio, que se pone el sacerdote sobre los hombros y espalda antes de colocarse el alba para celebrar la misa) y el manípulo (tira corta de tela que por medio de un fiador se sujeta al antebrazo izquierdo sobre la manga del alba). Además, a lo largo de la eucaristía hay algunos aspectos que difieren del rito actual; uno de ellos es que la oración del Padrenuestro solo la realiza el sacerdote; y otro es que la Consagración del Cuerpo y la Sangre de Cristo la recita en silencio y no en voz alta.

Otra de las cosas con las que se encontrarán quienes asistan a estas celebraciones litúrgicas será con un desarrollo notablemente diferente al actual, incluyendo muchas partes que habían quedado en desuso.

Las posturas durante la celebración es otro de los bloques que distinguen un rito del otro. Así, en el rito romano la mayor parte de la misa los presentes permanecen de pie o de rodillas, salvo pequeños momentos en los que el ritual permite que se sienten en los bancos.

Para ayudar a la comprensión y participación de los que acudan a estas misas, Una Voce Cádiz confeccionará una guía en la que se desarrolla el ritual junto a la traducción al castellano, y en el que se irán indicando qué postura hay que adoptar en cada momento (de pie, sentado o de rodillas). Eso sí, la asociación pide "el debido decoro y que sigan las indicaciones" a todo el que quiera acudir a este ritual recuperado.