Vecinos de Doctor Fleming, 8 se quejan del ruido de un bar de copas

Los vecinos de Doctor Fleming, 8 están desesperados. Ya no pueden más. Llevan años denunciando el ruido y, sobre todo, la música del pub Offside/Onside, situado en el bajo de ese bloque.

"Los fines de semana es insoportable, aquí no se puede dormir. En el primero y el segundo piso se escucha la música y las vibraciones llegan hasta el cuarto", se queja una vecina de la primera planta, quien añade que su hija no le deja a los nietos los fines de semana porque no pueden dormir.

Otro inquilino del bloque señala que allí viven personas mayores y enfermas que no consiguen descansar. También hay entre los vecinos personal sanitario que asegura que tiene que desempeñar su trabajo "a costa de café o pastillas para dormir; esto nos está afectando a la salud y al trabajo".

Desde el año 2004, cuando sólo existía uno de los bares, han interpuesto hasta 22 denuncias a la Policía Local, la última el pasado 13 de julio a las 04:15 horas de la noche. En esta, se lee que los agentes "comprueban los hechos denunciados consistentes en el volumen de la música alto y ruidos molestos". Una denuncia anterior, del 9 de junio a las 03:05 horas, recoge que "los agentes actuantes comprueban que la música del pub se puede oír a un volumen elevado desde todas las estancias de la vivienda", refiriéndose al 1ºB.

Los afectados aseguran que llevan años presentando escritos al Ayuntamiento, adjuntando estas denuncias, y han pedido cita con el concejal de Urbanismo, que nunca los ha recibido. "El Ayuntamiento nos ha dado largas, no ha intentado enterarse del problema ni resolverlo. Hemos tenido que contratar a un técnico y a un abogado, con el coste que eso conlleva, porque el Ayuntamiento no nos hace caso. Nos hemos sentido desprotegidos", señala una de las vecinas.

Otro muestra un informe del técnico municipal elaborado en el mes de junio en el que se detectan "numerosas irregularidades", sobrepasando los niveles de emisión máximos de sonido requeridos para un bar con música. Hay que decir que el límite se establece en un nivel de emisión sonora menor o igual a 90 decibelios, mientras que el documento recoge que en muchas ocasiones el nivel oscilaba entre los 94 y los 102 decibelios.

Tras este informe, la Alcaldía decretó "la incoación de expediente sancionador" al responsable del local Offside/Onside por una "infracción del artículo 29 en relación con el artículo 58 del Decreto 6/2012 de 17 de enero por el que se aprueba el Reglamento de Protección contra la contaminación acústica en Andalucía". Y como medida cautelar, dispone el precintado "de cualquier equipo de música instalado en el local" hasta que no se aporte la documentación y mediciones que permita el informe favorable del técnico municipal. También advierte que "el funcionamiento o nueva instalación de estos aparatos sin la autorización correspondiente, puede dar lugar a la revocación de la licencia".

Los vecinos afirman que "estamos a finales de julio y, aunque en menor medida, la música se sigue escuchando y el local no ha sido precintado". Dicen estar "dolidos" e "indignados" con el Ayuntamiento, porque "muchos vecinos los hemos votado creyendo que iban a trabajar por los ciudadanos de forma justa, y no para amparar posturas inadmisibles e ilegales".

Desde el Ayuntamiento aseguran que en este conflicto entre el bar y los vecinos del entorno ha actuado "en todo momento, desde 2011 hasta hoy, salvaguardando los derechos de los vecinos y de los hosteleros, conforme a la legislación vigente". Añaden que en el mes de junio, comparecieron en el Servicio de Urbanismo los denunciados, que se comprometieron "al cambio de actividad del local para disminuir los ruidos producidos por los equipos de música, lo que presentan por escrito con fecha 20/06/2013 aportando certificado del técnico de la propiedad donde se reestructura el limitador eliminando dos altavoces y disminuyendo considerablemente el volumen del establecimiento. Se intenta por dicho técnico realizar una medición de comprobación en la vivienda del denunciante negándose éste por el momento".

Los vecinos señalan que no se niegan a las mediciones, "lo único que pedimos es que, después de todas las que se han hecho y que no han servido para nada, nos den por escrito qué van a hacer y en qué van a repercutir esas mediciones. Pero no nos han traído el escrito".

Y han formulado un recurso de reposición frente al decreto municipal en el que, entre otras cosas, señalan que la infracción del pub debe catalogarse como "muy grave", lo que conlleva una sanción mayor a la que establece el Consistorio. Piden que se hagan efectivas las medidas "porque seguimos esperando que el Ayuntamiento actúe", apunta un vecino, quien asegura que "lo único que queremos es poder dormir. No queremos que cierren el bar, sólo pedimos que lo insonoricen".