LTK, compañía logística que trabajaba para Alestis, ha comunicado en la mañana de este martes a los trabajadores el despido colectivo mediante la entrega de la documentación. Concretamente ha informado al comité de empresa la intención de emprender un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) “por causas productivas y organizativas”.

Por otra parte, a cada empleado se le ha entregado un documento en el que se les explica que durante el mes de noviembre no tebdrá que acudir a la fábrica y se le concederá un permiso retribuido. En total son 51 personas las afectadas, ya que el resto hasta llegar a 70 pertenecen a los centros de LTK en El Puerto y Puerto Real.

La noticia ha pillado este fin de semana por sorpresa a los trabajadores. De hecho, el viernes se les comunicó que este martes estaban citados todos para las siete de la mañana en la planta que se encuentra en la antigua fábrica de Altadis y durante el fin de semana pudieron ver cómo se desmantelaba al completo la nave, llegando incluso a tirar enseres personales a unos contenedores que estaban en el exterior.

Ante esta situación, desde este mismo ,artes empieza a contabilizar el período de negociación del ERE, al que se niegan rotundamente los representantes de la plantilla, que solicitan ser recolocados en otras plantas donde continúa la actividad como las de Puerto Real o El Puerto de Santa María. Hay que tener en cuenta que Alestis anunció que internalizaría el servicio logístico, ante lo que la plantilla de la empresa gaditana pide ser reubicados porque entienden que se produce una sucesión de empresas.

De hecho, Ismael Sánchez, responsable de acción sindical del SAT (Sindicato Andaluz de Trabajadores) ha hecho referencia a un antecedente que tuvo lugar en Sevilla hace un año. En ese caso el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) obligó a Alestis a hacerse cargo de todos los empleados que habían sido despedidos también por una internalización del servicio.

En este sentido, señalan que hay jurisprudencia al respecto y que, por lo tanto, “no debe juzgarse de nuevo y lo que debe ocurrir es que estos trabajadores pasen a ser de Alestis porque si se llevan la carga, también se deben llevar a los trabajadores”.

En este punto también incidía Ana Malines, representante de Comisiones Obreras en el comité de empresa: “Si nuestra carga de trabajo se ha ido para Alestis, entonces nosotros también nos tememos que ir para allá”.

Desde LTK señalan por su parte que el contrato que tenía Alestis con esta firma se ha roto, motivo por el que se ven obligados a cerrar la planta de Cádiz, tal y como aparece en el escrito que le han entregado a cada uno de los trabajadores.

En el mismo también se señala que LTK ha sido requerida por Alestis para la devolución inmediata de las llaves, ya que esta segunda empresa es la que aparece como arrendataria frente a la Zona Franca de Cádiz.

Desde primera hora de la mañana se ha podido ver a los miembros de esta plantilla destrozados y enfadados por las formas, al haberse ejecutado el cierre de un día para otro, además de haberse desmantelado la nave durante el fin de semana. De hecho, muchos de ellos salían con sus pertenencias de la empresa metidas en cajas de cartón.

Aunque todavía no lo tienen claro del todo y estaban decidiéndolo, los trabajadores quieren iniciar desde este mismo miércoles movilizaciones para tratar de visibilizar su situación y para tratar de llegar a una solución.

Fran González, delegado de la Zona Franca, en cuyo recinto se encuentra esta empresa, se ha acercado a hablar con ellos y se ha interesado por su situación y se ha comprometido a realizar un escrito a Alestis, que precisamente es la empresa que le tiene arrendada la nave con el Consorcio.

También acudieron los concejales de Adelante Cádiz en el Ayuntamiento de la capital, Carlos Paradas y Lorena Garrón, y el hasta hace poco portavoz adjunto de Adelante Andalucía en el Parlamento, José Ignacio García, para mostrar su apoyo a la plantilla.