"En Cádiz somos un poco extremistas para algunas cosas, nos alarmamos mucho. Pero eso, yo creo que es mi obligación lanzar ahora un mensaje de moderación". Con estas palabras, el viceconsejero de Empleo de la Junta de Andalucía, Agustín Barberá, ha querido trasladar calma a los gaditanos que se han visto sorprendidos por la intención de derribar Tiempo Libre que este periódico dio a conocer la semana pasada.

Barberá asegura que desde la Junta de Andalucía se actua "por la seguridad", lo que avala su decisión de demoler el edificio y construir allí otra residencia de Tiempo Libre. "Abrirla en estas condiciones sería una temeridad. Nos hemos guiado por la prudencia, aunque algunos lo hayan querido utilizar como arma arrojadiza por una visión partidista de los hechos", manifestaba Barberá.

El segundo de a bordo en la Consejería de Empleo pidió ayer un voto de confianza de la ciudadanía al planteamiento que va a desarrollar en los próximos meses la Junta de Andalucía para este edificio y esta zona de la ciudad, asegurando que cuando concluya la construcción del nuevo edificio todos quedarán convencidos. "Vamos a alegrarnos de lo que se va a hacer allí. Todo está muy pensando", concluyó al respecto Agustín Barberá.