El Real Tenis Club de Cádiz va a tener que salvar un match ball (bola de partido) después de que el Ayuntamiento de Cádiz le haya enviado un requerimiento en el que le reclama el pago de la renta por la ocupación del espacio desde el año 2015. De hecho, desde la Delegación de Patrimonio se le envió una carta a principios de abril en la que se le ordenaba a entregar las llaves del club en el plazo de diez días debido a esta deuda que se le reclama y que asciende a algo más de 100.000 euros.

Esto tiene su origen en el año 2005, cuando el Club de Tenis volvió a reabrir sus puertas después de la obra que hizo el Ayuntamiento para un aparcamiento subterráneo en los bajos del club. En la superficie se hicieron unos nuevos equipamientos con dos pistas de tenis, otras dos de padel, una zona para bar y otros lugares para la estancia de los socios. Ahí, con el Ayuntamiento del Partido Popular, se firmó un contrato de arrendamiento por la utilización del club que la sociedad fue pagando hasta el mencionado año 2015.

Sin embargo, ese era el ejercicio en el que expiraba el contrato de arrendamiento con el Ayuntamiento. Poco antes de que acabara el mismo, el anterior presidente de la entidad, Manuel Cotorruelo, hizo varios escritos en los que se daba aviso del final del contrato y conminaba al Ayuntamiento a la firma de uno nuevo. Sin embargo, no se obtuvo respuesta alguna por parte municipal.

Desde entonces el Real Tenis Club de Cádiz ha estado ocupando las instalaciones en precario sin un contrato de por medio y sin que se abonara la renta mensual. Todo siguió de este modo hasta que a principios de abril la delegación de Patrimonio que encabeza Paco Cano enviara esta carta en la que se reclamaba la deuda y con el aviso de que se debía entregar las llaves del club en diez días. En el débito también se incluía el pago de los distintos ejercicios de Impuesto de Bienes Inmuebles.

Paco Cano afirma que este es un paso obligado por parte del Ayuntamiento según las directrices que marca Intervención y también porque se ha de justificar ante el Tribunal de Cuentas este impago y la precariedad de la relación entre las dos partes.

Una vez que saltaron las alarmas en el Real Tenis Club de Cádiz, la directiva presidida por José Antonio Jover pidió una reunión con Paco Cano que se produjo en el Ayuntamiento.

Cano asegura que “la voluntad del Ayuntamiento es que se produzca un entendimiento y darle todas las facilidades” pero entienden que deben cumplimentar la deuda.

El edil del equipo de Gobierno asegura que lo que se les ha pedido es, por un lado, que abonen los recibos de este año y, por otro, un fraccionamiento de la deuda pendiente desde el año 2015. Cano, en este sentido, ha asegurado que se le ha pedido un documento donde se detalle el plazo para el pago de la deuda pendiente.

Desde el Real Tenis Club de Cádiz se ha dejado el tema en manos de abogados y se va a intentar llegar a algún tipo de acuerdo con el equipo de Gobierno. Uno de los objetivos de la entidad social es que se pueda hacer un nuevo contrato.

Sin embargo, aquí sí que se produce un problema y es que cuando se hizo en 2005 el documento no se hablaba en ningún caso de una prórroga. Esto podría dar lugar, según Paco Cano, a que se tuviera que sacar un proceso de licitación para la explotación de las instalaciones con el problema de que si el club de tenis tiene una deuda pendiente con el Ayuntamiento, no podría concurrir al mismo.

El otro de los escenarios lejanos en el tiempo si se agotan todas las vías es que pasara a manos municipales la gestión de estas instalaciones deportivas.

El Real Tenis Club de Cádiz cumplió sus cien años de historia en el año 2011, para lo cual se celebraron una serie de actos a lo largo del mismo. En la actualidad cuenta con 70 socios pero por sus pistas han pasado innumerables niños que han estado participando en la escuela.