Yahora qué? El 1-O era el día en el que acababa el mundo y parece ser que es el día en el que empieza otro. Las costuras sin suturar durante años y ayer abiertas de nuevo plantean un panorama sombrío. Los españoles son quizás más españoles y los independentistas hoy lo son más que ayer. Las posturas se han radicalizado. Estamos en un callejón sin salida. La ley está para cumplirla, claro que sí, y lo que se ha hecho en Cataluña es totalmente ilegal. ¿Pero se va a acabar la rabia con eso? Lo dudo mucho. Seguramente hoy estaremos en la misma postura que ayer y eso no va a desaparecer. ¿Cuál es el camino que se debe recorrer? Esa es la gran incógnita pero viendo la clase política que nos dirige, cualquier cosa nos podemos esperar. Es lamentable que en estos momentos algunos hablen de moción de censura tratando de aprovechar la miseria y el fango que rebosa por todos lados. Lo de siempre.