La reconquista cristiana de Cádiz

El paso de Cádiz y su isla a la Corona de Castilla, continúa siendo para los investigadores del tema una de las páginas enigmáticas de nuestra historia. La falta de documentos directos sobre el tema, ha llevado a que se trate sólo como hipótesis. Así, se cuestiona: la fecha en la que se produjo (lo que ha dado lugar a un abanico de opiniones), el Rey que lo hizo (Fernando III o Alfonso X), e incluso el procedimiento (mediante conquista ó pacto/vasallaje).

Con la intención de valorar aquel momento, dedicamos un trabajo publicado en el número 13 de la Revista del Área de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad de Cádiz Al-Andalus Magreb, donde se procedió a una ordenación cronológicas de las limitadas noticias que habían llegado hasta nuestros días sobre dicho tema. Éstas fueron valoradas en el contexto de la última fase de ocupación musulmana para inscribirla posteriormente en la evolución del avance cristiano a través del bajo Guadalquivir y Guadalete, y de la política castellana sobre el Estrecho y el Norte de África.

Dentro de dicho marco Cádiz fue un asentamiento más que vivió la inseguridad de aquellos inestables límites, expuestas a continuos avances y retrocesos dentro de un concepto que se ha perpetuado en algunas poblaciones cercanas como "frontera". No podemos abstraer a nuestra ciudad de aquellas situaciones ni valorarla como una entidad diferente y a parte. Motivo por lo que padeció todos aquellos avatares que afectaron a la región y su comarca como fueron las revueltas mudéjares. La conclusión fue realmente sorprendente. Nuestra hipótesis de trabajo nos descubre un Cádiz hispano-musulmán con un cierto peso en la zona y enclave militar, dotado de fortaleza y murallas que sufrió una serie de ataques continuados por ambos bandos desde 1235 hasta 1264. Pasó por primera vez a manos cristianas en 1249 en tiempos del Rey Fernando III y todos los indicios apuntan a que fue por asedio. Aunque estas y otras cuestiones no serian definitivas y sería su hijo Alfonso X quien la completaría descubriendo a su vez la importancia estratégica de su puerto. Ello le llevó a reconstruir su fortaleza y su Cerca, levantando la Catedral y concediéndole el rango de "ciudad" que aún conserva; a la vez que la incluía en proyectos más ambiciosos como el del "fecho del mar" o conquista de los musulmanes en su propia tierra: el Norte de África.