Las cuentas compartidas de Netflix: lo que ocurre al no seleccionar ubicación principal

Adiós a las cuentas compartidas en Netflix. Desde que se supo, muchas familias están replanteándose su permanencia en la plataforma de streaming. La compañía dio de límite hasta el pasado 21 de febrero para configurar la ubicación principal de cada cuenta. O dicho de otra forma, en qué hogar se iba a poder ver Netflix. De ese modo, los usuarios que se conectasen en el perfil desde fuera de la casa, no podrían ver el contenido o tendrían que crearse una nueva cuenta.

La manera de comprobar la ubicación del dispositivo es mediante dirección IP. Durante días pasados, la plataforma avisaba en un mensaje que si no se establecía una dirección fija, esta se decretaría de manera automática. La cuestión es que al no informar a la compañía de la dirección IP que se va a usar con normalidad, la propia Netflix se encarga de escoger. Y lo hace según el historial de actividad y dispositivos.

¿Es infalible el método de Netflix para limitar las cuentas compartidas?

La modificación de los datos de una cuenta en Netflix apenas requiere dos pasos para informar de cuál es el perfil principal y cuál la dirección IP asociada al wifi del hogar. Desde que se tome esa decisión, teóricamente se bloquea el acceso a los que intenten entrar desde otro lugar. El objetivo es que el resto de personas que se conectan con la cuenta compartida hagan sus perfiles propios y embolsen su tarifa propia cada mes.

Sin embargo, en estos primeros días de la entrada en vigor de las restricciones, muchos usuarios afirman que están sorteando la nueva medida de Netflix. Sobre todo, esto se debe a que el sistema de reconocimiento de las ubicaciones de la plataforma no está siendo del todo efectivo. Muchos de los clientes ni siquiera han dado la información necesaria al servicio de streaming. Entonces, Netflix les ha asignado un lugar de manera automática, aunque de una forma un tanto imprecisa. Esos fallos técnicos en la geolocalización están salvando en estas primeras horas de que ciertas personas sean bloqueadas al intentar ver sus series y películas favoritas.