La cuenta atrás para escoger una carrera universitaria ya ha empezado para muchos alumnos. Eso sí, antes queda el duro escollo de la Selectividad, del 14 al 16 de junio. Una vez pasada esta evaluación, el siguiente paso es conocer las notas con las que el estudiante sabrá a qué puede aspirar. Estas se hacen públicas el mismo 23 de junio. Y desde ese mismo día hasta el 1 de julio, es la preinscripción de la matrícula. 

La primera resolución de aceptados para realizar la matrícula tiene lugar el 7 de julio con aquellos estudiantes que hayan superado la EBAU y tengan las calificaciones exigidas para ese grado. Ese mismo día, también se publica la nota de corte actualizada. 

A partir de aquí, la nota de corte varía en función del número de alumnos que formalicen su matrícula. Normalmente, suele bajar. El proceso de matriculación puede extenderse hasta octubre si finalmente hay convocatoria extraordinaria. En todo ese tiempo que dura el trámite, la nota de corte puede cambiar.

Las carreras donde la nota bajó más durante las matriculaciones

Normalmente, no hay diferencia sustancial entre la calificación que se exige de partida y la resultante al cerrarse la convocatoria de acceso al grado. Por ejemplo, en una carrera como Medicina, se requería en 2021 al principio un 13,430, mientras que al cierre de convocatoria un 13,232. Otro caso más. Ingeniería Química y Biotecnología inició el proceso con un 13,303 y lo terminó con 12,142. O Filología Hispánica más Estudios Ingleses que pasó del 12,842 al 11,916.

Sin embargo, hay otras situaciones en los que la nota de corte varía con creces entre el primer periodo de prematrícula y el final del trámite. Concretamente, el doble grado de Ciencias Ambientales y Ciencias del Mar empezó en 2021 con un 10,744 y acabó con un 5 en su fase extraordinaria. Más ejemplos. El doble grado de Química y Enología tenía un 11,282 y cerró en un 5. Igual le pasó a la carrera de Enología, del 7,920 al 5. O al doble grado de filología clásica y estudios ingleses, donde se solicitaba un 11,223 para acceder y bastó, en última instancia, con un 5.

Uno de los motivos que explican estas bajadas tan abruptas en ciertas carreras son los cambios de los propios alumnos. Es decir, casos de estudiantes que inicialmente escogieron ciertos estudios como primera opción pero que después cambiaron de opinión.