Tenían muy difícil los hermanos de la Cofradía lasalina de La Borriquita superar las emociones vividas el pasado Domingo de Ramos en el que completaron una magnífica salida procesional, pero este Martes Santo había que renovar emociones para asistir a la salida de otro de los titulares de la Hermandad, el Cristo del Perdón y la Misericordia.

Muy pendientes del tiempo, que el Lunes Santo impidió la salida de la Hermandad de Los Dolores y que a lo largo de toda la jornada estuvo amenazando, los cofrades decidieron salir a la calle y abrir por segunda vez, en esta Semana de Pasión de los reencuentros, las puertas de la Casa Hermandad del colegio La Salle Buen Consejo.

Media hora antes de la hora prevista para la salida, la Junta de Gobierno de la Hermandad de La Borriquita se reunía en la Casa Hermandad. “Probablemente salgamos, pero hay que dar una cierta tranquilidad”, decía el Hermano Mayor, José Antonio Pantoja, a un grupo de Hermanos. La reunión apenas duró unos minutos y tras ella se dio la orden para que los costaleros se preparasen y los hermanos penitentes empezasen a formar las secciones. “Vamos a salir, pero intentaremos aligerar un poco el cortejo y adelantar los horarios por si acaso. La amenaza de lluvia no es muy clara y hay que tenerlo en cuenta”, informó Pantoja. Y así, la hermandad volvía a la calle otro Martes Santo.

Con el habitual silencio que envuelve a este cortejo procesional, salía la cruz de guía que antaño procesionaba los Domingos de Ramos y que salió de las manos de Juan José Días Almenara. Tras ella, alrededor de 50 hermanos acompañaban el Cristo en cuatro secciones, la primera de ellas con túnica blanca y esclavina negra, y el resto con cíngulo de seda con antifaz de sarga negro que se estrenaban este año.

Con los suaves sonidos de la Capilla Musical ‘Santus Christus’, la imagen del Cristo abandonaba el colegio para realizar su salida procesional. La relación de la talla con el centro educativo es fundamental para entender su historia, ya que la imagen fue adquirida por la Asociación de Antiguos Alumnos y Padres de Familia del Colegio La Salle y se encuentra al culto en la capilla – oratorio del Colegio. En 1.982, la Hermandad incorporó la imagen como titular de la misma.

La sencillez en todos los aspectos fue nuevamente lo más destacado del desfile del Cristo del Perdón y la Misericordia, que llevaba un exorno floral compuesto exclusivamente por claveles rojos que los escolares del colegio La Salle ofrecieron al señor el viernes dolores. Un lazo negro recordaba que la Cofradía se encuentra de luto por el fallecimiento de Antonio Daneri Quintero, hermano que ostentó los cargos de secretario y fiscal de la hermandad en los años 70 y 80.

En un ambiente de calma y profundo recogimiento, la Hermandad se adentraba en el barrio de San Eloy, donde se realizó la primera parada para el rezo. Y es que la Hermandad, como viene siendo habitual, realizó durante el recorrido el rezo de las catorce estaciones del Vía Crucis, que fueron comentadas por el Padre Bernard Mucipayi Kayembe, Vicario Parroquial de la Iglesia de San Sebastián.

Y precisamente, hasta el principal templo de la Villa se dirigía el cortejo procesional tras su salida, recorriendo gran parte de la calle San José, para realizar estación de penitencia. El paso, portado por 24 hermanos costaleros, estuvo una vez más comandado por sus capataces Antonio Galvín y José María González, y sus auxiliares Antonio Jesús Jaén y Luis Romero.

Y las previsiones meteorológicas se empezaron a cumplir nada más dejar atrás la Prioral. Cuando la Hermandad bajaba por la calle de la Palma, la lluvia hizo su inoportuno acto de presencia. Y aunque fue de baja intensidad, puso en alerta a los cofrades de aligeraron aún más el paso por la carrera oficial, para regresar a la Casa Hermandad antes de lo previsto.

La sencillez en todos los aspectos fue nuevamente lo más destacado del desfile del Cristo del Perdón y la Misericordia, que llevaba un exorno floral compuesto exclusivamente por claveles rojos que los escolares del colegio La Salle ofrecieron al señor el viernes dolores. Un lazo negro recordaba que la Cofradía se encuentra de luto por el fallecimiento de Antonio Daneri Quintero, hermano que ostentó los cargos de secretario y fiscal de la hermandad en los años 70 y 80.