Las obras de urbanización del nuevo polígono industrial Fadricas II alcanzan ya casi un tercio de la actuación global.

Los movimientos de tierras y las canalizaciones de la red de pluviales, fecales y el resto de alcantarillado acaban de terminar y, a estas alturas, comienza a vislumbrarse la división en calles y la configuración del futuro parque. Así, todo apunta a que a finales del próximo verano -septiembre, para más señas- habrá concluido la urbanización y comenzarán a entregarse a los propietarios las llaves de las naves.

Ayer el alcalde, Manuel de Bernardo, acompañado de la delegada general de Urbanismo, Carmen Pedemonte, y otros técnicos tanto de la Gerencia como de la Empresa Municipal de Suelo (Esisa), realizaron una visita a los trabajos para comprobar su grado de ejecución. En las declaraciones que el regidor efectuó a los medios de comunicación, subrayó que las obras de los accesos a Fadricas -de las que es responsable Fomento- han ralentizado en parte las del nuevo polígono, ya que ambas se están intentando desarrollar paralelamente.

Con la empresa encargada del desdoble de la vía del tren, que se ejecuta en las inmediaciones, también se está entablando una colaboración mutua. De hecho, se están realizando pruebas para sustituir la zahorra que sirve de base a los cimientos de las futuras naves por balasto (las piedras características de todas las vías férreas); este material aportará más consistencia al firme, además de resultar más barato. En los terrenos se aprecia ya, además, algunos huecos de grandes dimensiones excavados en la superficie, que es donde se ubicarán los aparcamientos subterráneos con que contarán algunas naves.

De Bernardo informó ayer de que, aparte del 7% que pertenece el Ayuntamiento, todas las parcelas tienen ya propietario o se han comenzado ya los trámites para que lo tengan. "A pesar de que el precio del suelo es superior que en otros polígonos industriales", reconoció.