Principios o mediados de julio. Es el plazo que inicialmente se manejaba para la terminación de las obras de remodelación de la plaza del Rey, cuyo plazo de ejecución es de 6 meses. Transcurridos ya 5 desde el comienzo de los trabajos –que arrancaron después de Navidades– la previsión sigue siendo la misma, aunque el estado que actualmente presentan las obras suscite dudas al respecto.

La cuestión tiene su importancia, claro. No solo porque se trata de la terminación de uno de los proyectos clave del mandato que supone una inversión de 1,2 millones de euros, sino también por la repercusión que los trabajos en marcha pueden llegar a tener en la temporada de verano para la hostelería del centro y sus terrazas, que en los últimos meses han capeado la complicada situación en los emplazamientos provisionales que se han habilitado junto al cerramiento de la obra.

El Ayuntamiento isleño ha tratatado ya la cuestión de los plazos con la UTE adjudicataria, integrada por las empresas Gestión y Ejecución de Obra Civil SAU y Serrazar SL. Y su respuesta –confirmaba este miércoles la propia alcaldesa, Patricia Cavada– ha sido la misma de hace 5 meses: que los plazos de ejecución de la obra se van a cumplir, con lo que la obra terminaría en mes y medio.

Así, de hecho, se lo aseguraron en la última reunión de coordinación que mantuvieron hace tan solo unos días, por lo que la regidora, toda vez que los trabajos se mantienen dentro de ese plazo de 6 meses previsto, ha mostrado su confianza en la planificación y los tiempos que maneja la adjudicataria.

"Ahora mismo lo que la empresa nos traslada es que cumplirá los tiempos del contrato. Evidentemente tendremos que darle el voto de confianza a eso que nos traslada", ha precisado la alcaldesa en declaraciones realizadas a este periódico.

"Su objetivo, por lo que nos han expuesto en las reuniones personales que hemos mantenido, es el cumplimiento de los plazos del contrato y quiero confiar en lo que nos dice la empresa", ha reiterado.

La obra de la plaza del Rey, evidentemente, no ha sido ajena a cuestiones como la huelga del transporte y la repercusión que tuvo en el suministro de materiales, lo que ha provocado retrasos en otras de las actuaciones que ahora mismo están en marcha en la localidad. La propia alcaldesa ha aludido también a esta cuestión al sopesar la marcha de los trabajos. Pero si la adjudicataria dice que va a cumplir con los plazos para terminar a mediados de julio, al Ayuntamiento ahora mismo no le queda otra que confiar en que así sea.

Según la planificación de la obra que se facilitó al comienzo de la actuación, la obra se planteaba en las siguientes fases: enero: desmontaje, traslado de Varela, cajón de obra; febrero: trabajos previos; marzo: excavaciones, infraestructuras y cimentación; abril: instalaciones superficiales (electricidad, pluviales, riego...); mayo: pavimentación; y junio: montaje mobiliario, toldos, iluminación, etc...

Cavada ha insistido también en el "cambio radical" que dicha actuación va a suponer para el centro.