El gobierno municipal solventará el trámite de la aprobación definitiva de los presupuestos municipales la próxima semana, lo que le permitirá llegar a septiembre e iniciar el nuevo curso político -el último además del mandato- con el balón de oxígeno que suponen las nuevas cuentas en vigor.

Ayer, el ejecutivo lanzó una convocatoria extraordinaria de la comisión informativa de Hacienda para la jornada del próximo martes 24 en la que se abordará el expediente de resolución de las alegaciones presentadas durante el periodo de exposición pública de la propuesta de presupuestos, que superó en el pleno de junio su aprobación inicial.

Si hay acuerdo, el punto podría tratarse con carácter urgente en la sesión ordinaria

Además, ha convocado un pleno extraordinario para el viernes 27 que -previsiblemente- se ahorrará si, como parece lógico, los grupos municipales acuerdan previamente la inclusión del punto entre los asuntos a debatir carácter urgente en la sesión ordinaria que se celebrará solo un día antes, el jueves 26. Así, de hecho, lo espera el concejal de Presidencia y Desarrollo Económico, Conrado Rodríguez. En todo caso, el equipo de gobierno confía en cerrar la semana -y el mes de julio- con la publicación de los presupuestos en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

Solo dos alegaciones presentadas durante el periodo de exposición pública de los presupuestos tras la aprobación inicial han sido aceptadas e incorporadas al texto. Ambas -explicó el edil socialista- se refieren a la necesidad de indicar con precisión la relación laboral del personal que trabaja en la Empresa de Suelo Isleña (Esisa). Tanto el PP como el sindicato CSIF habían insistido en esta cuestión de forma.

El resto de las alegaciones, que ha sido evaluadas esta misma semana, han sido descartadas. Según Conrado Rodríguez, dichas propuestas respondían más a criterios políticos -un debate que ya se considera zanjado- que a cuestiones técnicas o formales. De ahí -sostiene- que hayan sido rechazadas. Entre ellas había propuestas de los populares, de IU, de Plataforma 3R...

Previsiblemente, y salvo sorpresa de última hora, el equipo de gobierno sorteará sin muchas dificultades la aprobación definitiva de unos presupuestos cuya tramitación consiguió salir adelante en el pasado mes de junio gracias a las abstenciones de Ciudadanos y de la concejala no adscrita, Inmaculada López.

Los presupuestos -que superan los 78 millones de euros de gasto- destinan hasta 8,5 millones de euros a la ejecución de inversiones, entre las que se incluyen los proyectos votados por la ciudadanía en la campaña de los presupuestos participativos que se llevó a cabo en otoño de 2016. Hay vistosos e importantes proyectos que podrán empezar a gestionarse ya pero que, en realidad, será difícil que puedan verse materializados antes de las próximas elecciones municipales.

Entre las inversiones planteadas se incluye un proyecto de mejora del polígono industrial de Fadricas -son constantes las reivindicaciones de la comunidad de propietarios- al que se destinarán 800.000 euros y la segunda fase de la remodelación del Mercado Central, que permitirá transformar por completo la plaza de abastos y su entorno (325.000 euros). También la continuación del proyecto de la avenida Pery Junquera (1,2 millones de euros), que pretende la adecuación de cuatro carrilles de circulación en prácticamente toda su extensión. Y una actuación muy señalada que, a buen seguro, alcanzará una amplia repercusión cuando se ejecute: la llamada ciudad de los niños (400.000 euros), una amplia zona de ocio, esparcimiento y juegos infantiles para toda la familia que se planea adecuar en el parque del Barrero.

Los nuevos presupuestos destinan también una partida a un proyecto que se viene reivindicando desde hace tiempo: la construcción de una nueva sala de estudio para los jóvenes en el entorno del Parque (623.700 euros).