La Isla se despide de Tito Collantes, un nombre propio de su Semana Santa

La Isla se despedirá hoy de uno de los nombres propios que ha escrito su Semana Santa a lo largo del último medio siglo. Florencio Collantes Pérez, Tito, falleció en la madrugada de ayer en su domicilio de la calle Marconi, rodeado de los suyos y con cientos de isleños que desde hacía días andaban con el teléfono entre manos pendientes de su delicado estado de salud. Tenía 74 años.

A Tito, que fue uno de aquellos jóvenes que puso la Semana Santa isleña patas arriba cuando fundó la hermandad de la Misericordia en 1957, se le recuerda merecidamente como un cofrade ejemplar, de los exquisitos, hombre familiar, afable, cabal, discreto, elegante en sus maneras, culto, meticuloso... Un isleño, además, sobradamente conocido en la ciudad.

Más de 40 años estuvo en la junta de gobierno de esta cofradía del Jueves Santo, a la que dedicó su vida y de la que fue su hermano mayor en dos etapas: entre 1966 y 1975 y entre 1986 y 1990. En el año 2010, la hermandad tuvo a bien reconocerle su entrega y dedicación durante medio siglo al entregarle el título de Hermano de Honor de la corporación.

Tito Collantes fue uno de los grandes impulsores de la causa de la Hermana Cristina y también el promotor de los Encuentros de Hermandades de la Misericordia de Andalucía, cuando todavía se estilaba poco este tipo de convocatorias entre cofradías de una misma advocación. Por ello, fue también nombrado Presidente de Honor de la coordinadora de la Unión de Hermandades de Misericordia de Andalucía.

Paralela a su dedicación a la hermandad sacramental de Nuestro Padre Jesús de la Misericordia y María Santísima de la Piedad discurrió su trabajo en el Consejo de Hermandades y Cofradías, del que fue también su vicepresidente durante 18 años en distintas etapas. Era la eterna mano derecha de Manuel Muñoz Jordán, al que le unió una estrecha amistad y junto al que durante dos décadas formó un binomio cofrade de élite al que es justo atribuirle no pocos logros colectivos de la Semana Santa de San Fernando y, por ende, de sus hermandades.

Su afán por la investigación y el estudio fue otra de las facetas que caracterizó a Tito Collantes. Producto de esa pasión fueron varias publicaciones que La Isla atesora entre sus obras cofrades. Especial mención merece el Diccionario cofrade de La Isla, que vio la luz en 2004 tras varios años de trabajo y que constituye una obra única en su género. También Hermandades y cofradías de la Misericordia en Andalucía (1994) o la Historia de la Hermandad de la Misericordia de San Fernando, que escribió mano a mano con José Carlos Fernández Moreno y que fue publicada para conmemorar el 50 aniversario de la corporación.

Su legado cristiano y cofrade es patente en su familia, en sus hijos, Mercedes y Juan Carlos, y en sus nietos, todos ellos vinculados a la hermandad de la Misericordia. Juan Carlos, además, ha seguido sus pasos en el Consejo de Hermandades y Cofradías, de cuya junta permanente forma parte.

A primeras horas de ayer, el cuerpo sin vida de Florencio Collantes fue trasladado al tanatorio de San Fernando, donde fue velado durante todo el día. Las muestras de pesar y condolencias que recibió la familia fueron constantes a lo largo de la jornada. Hoy, a las 10.30 horas, está previsto que se celebre la misa funeral en la parroquia de la Divina Pastora, junto a los titulares de la hermandad a la que consagró su vida.