El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) volverá a mantener un año más la cuota que actualmente se paga con la decisión del gobierno municipal de rebajar el tipo impositivo que permite esta congelación. Será el tercer año que se aplica la medida en San Fernando, destacaba ayer el concejal de Presidencia, Conrado Rodríguez, encargado de anunciar la nueva a los ciudadanos.

"Es una buena noticia para los isleños", apunta el edil socialista sobre el impuesto que más directamente afecta al bolsillo de los ciudadanos, y al que aplican esta política desde el inicio del mandato. "El primer año cuando elaboramos las ordenanzas fiscales de 2016 se tomó la decisión ante la situación económica y social de mantener la cuota", recuerda Rodríguez sobre la postura adoptada entonces por el equipo de gobierno y que conllevó una serie de acciones para la congelación del impuesto.

Tendrá que esperar la comunicación oficial del Catastro para llevar la propuesta a pleno

El IBI se fija a partir de dos condicionantes: por un lado el valor catastral del inmueble y por otro el tipo impositivo que establece el ayuntamiento. "El valor catastral tiene que adecuar a la situación del mercado y de ello se encarga la Dirección General del Catastro", detallaba el también responsable del Área de Gestión Presupuestaria y Tributaria. Para ese año 2016 este organismo dependiente del Ministerio de Hacienda estimó para la actualización progresiva una subida del mencionado valor catastral del 10%, lo que motivó que el gobierno local optara por bajar el porcentaje que aplica a ese valor para no subir el impuesto que pagan los isleños. El año pasado la revaloralización fue del 4%. Este año la previsión inicial, que debe confirmarse aún, es que el valor catastral volverá a subirse otro 4%. "Por eso volveremos a bajar el tipo impositivo de nuevo", insistió Rodríguez. Sería el tercer año que se opta por esta solución para no gravar más a los ciudadanos, resaltó para compararlo con la postura del gobierno anterior que -afirmó- durante su mandato llegó a acumular subidas del 10% en el IBI.

Este impuesto con el resto de ordenanzas fiscales deberá pasar por el pleno de octubre para que su tramitación administrativa -que culmine con la aprobación definitiva y su publicación oficial- se complete antes de finales de diciembre. Así es en teoría, matiza el concejal de Presidencia, porque, que el impuesto en cuestión se lleve a la sesión plenaria del próximo mes para darle el visto bueno con el resto de ordenanzas fiscales, depende de la comunicación de la Dirección General del Catastro. "Para llevar la propuesta de bajada del tipo impositivo al pleno municipal debemos esperar a que la propuesta de subida de los valores catastrales se confirme, porque aún no es definitiva", comenta Rodríguez, que recuerda que el año pasado el Ministerio de Hacienda optó por ampliar el plazo para la aprobación de este impuesto al retrasarse la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. En los próximo quince días debería producirse esta notificación a las corporaciones locales. En caso contrario, Hacienda deberá comunicar la ampliación del plazo.

"Nuestro objetivo es ser sensibles a la situación económica, financiera y social que está pasando muchas familias isleñas", defendió Rodríguez acerca del esfuezo que se hace para asumir estas medidas aún cuando el IBI es la principal fuente de ingresos de las haciendas locales y a la vez mantener servicios públicos. El edil habló en ese sentido de la gestión en materia de inversiones -para revitalizar el centro y la playa; la actividad comercial, de hostelería o el turismo-.