La retirada de la estatua de Varela ha coincidido esta semana con  la propuesta que ha realizado el Ateneo Republicano y Memorialista de La Isla (ARMI) para la exhumación de las fosas comunes del cementerio en las que yacen enterradas las víctimas de la Guerra Civil, una iniciativa que sigue la estela de las actuaciones llevadas a cabo en localidades vecinas como Puerto Real y Cádiz.

El  colectivo, precisamente, se reunió el miércoles con la alcaldesa, Patricia Cavada, para insistir en esta petición y plantearles el proyecto en el que están trabajando. Y el gobierno municipal acogió de buen grado sus propuestas. La regidora, de hecho, trasladó su compromiso a la entidad "para dar cumplimiento a las leyes que marcan las directrices que, en materia de memoria histórica, son obligatorias para las administraciones públicas". 

También en el pleno insistió Cavada en esta cuestión, aunque recordó que hay que esperar primero a que ARMI, y los grupos de trabajo que ha creado para la exhumación de los restos, concluyan primero el proyecto. 

El Ayuntamiento, en este sentido, se ha comprometido a trasladar esta petición a la Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía y al Servicio de Memoria Democrática de la Diputación Provincial de Cádiz, lo que supondría el comienzo de los trámites para que los expertos tuvieran los permisos correspondientes del Ayuntamiento para iniciar el proceso de identificación de quienes en su momento fueron enterrados en la fosa común del cementerio isleño a través de un proyecto de intervención que, como en las actuaciones que se están llevando a cabo en las fosas de Cádiz y Puerto Real, estaría coordinado y sufragado por la administración autonómica. 

El grupo de trabajo de ARMI, apuntó también Cavada en la sesión plenaria, tiene todavía que consultar documentación en el cementerio para concluir el proyecto.