Agosto no ha apagado el fuego de Airbus. El regreso a las protestas en la factoría de Puerto Real, que pretende a toda costa frenar las intenciones de cierre de la multinacional, se ha hecho, una vez más, con barricadas de neumáticos incendiados que han cortado este jueves el acceso al Polígono Trocadero, en la Avenida de Portugal. El ambiente sigue siendo una mezcla entre rabia e incertidumbre

Convocados por el comité de empresa, la plantilla ha retomado las concentraciones en la puerta de la planta y ante el edificio de dirección, para rechazar las intenciones de la empresa que está comunicando a un grupo de trabajadores (once hasta el momento) su traslado desde la planta de El Trocadero (Puerto Real) hasta la del Centro Bahía de Cádiz (CBC) de El Puerto. Ocho de estos trabajadores deberán incorporarse mañana, pero el comité se niega a “sucumbir” ante esta “amenaza”.

“Desde el Comité asistimos a lo que pudiera ser la confirmación de un intento de agresión de la Dirección de Recursos Humanos, que quiere enviar trabajadores a otras platas y es algo contrario a lo que tenemos en convenio”, dijo este jueves durante la protesta, el presidente del comité de empresa puertorrealeño, Juan Manuel Trujillo.

Esta decisión “unilateral”, según remarca el Comité, se basa en que “la Dirección vuelve a tratar de imponer sus tesis, metiendo más madera, presionando, y aumentando el número de trabajadores que pretende desplazar sin un acuerdo previo con la representación social”, remarcan los trabajadores.

Trujillo, en nombre del comité y de la plantilla, ha dejado claro que no van a permitir los traslados. “Hoy generamos este estado de crispación, pero mañana será el momento de ver hasta qué punto se confirman las amenazas. De ser así, que nadie tenga duda de la manera en la que vamos a responder tanto los trabajadores como los sindicatos”.

Y es que están convencidos de que el objetivo de la compañía es “desmembrar y reducir” los trabajadores de una planta para que no pueda ser tan competitiva como ha demostrado ser hasta ahora.

Las notificaciones de traslados también han llegado a la factoría de Airbus en Getafe (Madrid). En ese caso, los trabajadores pretenden ser trasladados a la factoría de Airbus San Pablo, en Sevilla.

“Si mañana nos encontramos con esta amenaza, tendrá la adecuada respuesta. No vamos a consentirlo a través de  las acciones sindicales que corresponden. Hay que reaccionar de forma colectiva y evitar estas agresiones”, afirmó Trujillo en la puerta de la factoría.

El comité vuelve a exigir a la dirección “que se siente a negociar de una puñetera vez” para acordar la solución del conflicto abierto en Airbus, tanto a nivel local como general. A finales de la pasada semana la comunicación de traslado llegó a ocho trabajadores y, tras haber sido rechazada por la representación sindical, la misma comunicación se ha repetido a principios de esta semana a otros tres empleados.

“Con ésta segunda actuación unilateral de la Dirección de Recursos Humanos no debe haber dudas ninguna duda para denunciar y rechazar los motivos que verdaderamente esconde la Dirección”, manifiestan en el comité.

Están convencidos de que la intención de la dirección es el “lento pero progresivo desmantelamiento de la planta”, evadiendo cualquier compromiso en materia de nuevas cargas de trabajo, empleo, tecnologías y el mantenimiento de plantas existentes dentro del perímetro de Airbus. Todo ello con ERTE sin complementos económicos y la  congelación salarial convenio.

Así las cosas, el comité de empresa de Airbus Puerto Real ha aprobado con el aval todos los sindicatos, seguir manteniendo lo que ya se acordó a principios de septiembre en el seno del Comité Interempresas de Airbus España. Entonces, también por unanimidad, se decidió mantener la “no colaboración con la empresa en todos los centros de trabajo sin excepciones y no mantener reuniones con la Dirección, una vez que esta rompiese las negociaciones al implantar un ERTE sin compensación alguna.

“La Dirección Central es conocedora de la posición sindical y, sin embargo, insiste en presionar en vez de sentarse a negociar para acordar la solución al conflicto”, dice el Comité de empresa.

Durante este mes de agosto, los trabajadores han seguido muy de cerca las noticias referentes a la compañía, como la “positiva cuenta de resultados del primer semestre para la empresa, la continuación de pedidos de aviones (A320 y A330), el lanzamiento de la versión carguero del A350 y la reactivación de parte de la flota estacionada del A380.

“Eso confirma nuestras tesis de que el mercado se está recuperando y hay que insistir en que el sector aeroespacial debe continuar la senda que hasta ahora llevamos, resolver los problemas derivados de la pandemia y ofrecer de nuevo oportunidades de empleo y condiciones laborales como las que hemos acuñado en los últimos años.