Escultura contemporánea inspirada en el mundo fenicio es el trabajo que expone el estadounidense de origen italo-libanés Douglas Abdell en el Museo Provincial de Cádiz. De la mano de El retorno del fenicio, su autor vuelve a la ciudad tras cuarenta años para mostrar este trabajo sobre nuestros primeros colonizadores.

La sala de exposiciones de la primera planta acoge así una serie de piezas que son fruto de la admiración de este artista por el mundo fenicio, por el que se siente fascinado, y que como a un imán le atrajo a Cádiz desde Nueva York hace algunas décadas.

De estos hábiles comerciantes no sólo le atrae el carácter de "colonos que buscaban el trueque de productos, sino que con ello perseguían un intercambio de ideas, costumbres y creencias", comentaba en la presentación de la exposición Daniel Moreno, delegado territorial de Cultura, que acompañaba al propio autor y al director del Museo Provincial de Cádiz, Juan Alonso de la Sierra.

Esta selección de piezas realizadas a lo largo de 35 años también es una mirada retrospectiva "con acusada dimensión tanto antropológica como sociológica en busca de raíces culturales, desde la actualidad a los momentos más remotos del pasado".

Una exhibición que es "un sueño cumplido", comentó Douglas Abdell, que narró que cuarenta años atrás estuvo en Nueva York al frente de una investigación sobre el mundo fenicio púnico que le condujo directo a Cádiz. Ahora ha regresado, ha paseado por Andalucía en busca del legado fenicio y desde el Museo de Cádiz, cuyos fondos acunan bien la producción contemporánea de este autor, mostraba este jueves lo orgulloso y feliz que se siente, pues, "si hay un escultor fenicio púnico vivo soy yo".

De hecho, su admiración por la cultura fenicia como parte sustancial de sus orígenes se convierte en un compromiso que trasciende a lo plástico, transcribiendo en materiales duros como el metal y la piedra códigos inspirados en estas culturas remotas.

La muestra de El retorno del fenicio se convirtió en la última que presentó Juan Alonso de la Sierra como director del Museo de Cádiz, pues se jubila en unos día, por lo que fue despedido con las emotivas palabras del delegado territorial de Cultura, Daniel Romero, quien destacó el gran trabajo de la persona que ha estado al frente de la pinacoteca estos últimos diez años.

Sus palabras fueron agradecidas por el propio Alonso de la Sierra que, visiblemente emocionado, decía que venían a "recompensar estos años en los que he entregado al Museo la mejor voluntad de la que he podido disponer".