El retiro de los amantes de las playas más tranquilas

Una duna de la playa de Cortadura azotada por el viento un día de levante.
Una duna de la playa de Cortadura azotada por el viento un día de levante.
/ Adrián Morillo / Cádiz

07 de agosto 2012 - 01:00

PLAYA DE CORTADURA

Aunque estemos acostumbrados a ir a la playa a echar la tarde con los amigos entre cartas, disfrutar de la tortilla y el gazpacho fresco de la abuela entre sombrillas o conversar con los vecinos de la zona que nos encontremos por la arena, hay quienes buscan en la playa soledad, tranquilidad y, sobre todo, intimidad. Parece que estas características no puedan ser propias de una costa tan conocida como la de Cádiz, pero la playa de Cortadura, a la entrada de la ciudad, termina con este tópico: sólo un par chiringuitos y una venta la coronan como tres refugios para los bañistas que necesitan refrescar la garganta o aplacar el hambre.

Los casi cuatro kilómetros de dunas de arena fina y dorada prácticamente vírgenes que posee esta playa garantizan espacio de sobra para quienes deseen alejarse de las multitudes. Es más, si desean disfrutar como dios nos trajo al mundo de la helada agua del Atlántico que la baña, pueden hacerlo cómodamente en la zona de Santibáñez. Pese a que años atrás el Ayuntamiento prohibió el nudismo bajo sanción administrativa en todas las playas gaditanas, tuvo que rectificar y permitirlo en esta zona por su innegable tradición nudista.

Si se temen los ojos de algún mirón esporádico, siempre se puede ir a tomar el sol refugiándose entre las amplias dunas interiores de la playa, arropadas por una vegetación de carácter dunar. Se rumorea por Cádiz que entre los médanos se producen citas de cruising, encuentros esporádicos entre desconocidos para disfrutar de algo más que el sol y la arena. Pero no se preocupen, las dunas son lo suficientemente amplias para que haya espacios para todos independientemente de lo que busquen. Y si aprieta el hambre, o le apetece tomarse una copa con algún nuevo compañero, tiene buenas opciones para acercarse dando un paseo por la orilla de la playa. Cerca de Torre Gorda, el chiringuito El Barco, ofrece durante los fines de semana, un excelente espeto de pescado que está siendo referencia en la provincia. En el lado opuesto de la playa, justo al inicio de la carretera de Andalucía, se encuentra el Nahu Beach, uno de los lugares de moda del verano.

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