Los trabajos arqueológicos que se están llevando a cabo en los terrenos del sector III de Camposoto, donde se está construyendo el futuro campo de hockey de San Fernando, continúan ofreciendo abundante información del poblado de Bronce Antiguo allí encontrado. "Se trata del yacimiento más importante de esta época hallado en la provincia de Cádiz, por extensión y singularidad", comenta el director de la excavación, Eduardo Vijande Vila, de la empresa Fligina.

La cuestión es que, por el momento, disponen de un tiempo de dos meses para continuar con los trabajos y aún queda por delante aproximadamente el cuarenta o cincuenta por ciento por excavar. "En este tiempo es imposible hacerlo. Así que, de confirmarse este plazo, no podremos avanzar y seguir extrayendo tan valiosa información", asevera Vijande. Todo depende de la reunión que hoy mantenga el equipo arqueológico con los técnicos de la Delegación Provincial de Cultura de la Junta de Andalucía, en cuyas manos se encuentra el futuro del yacimiento.

Hasta el momento, han aparecido tres áreas bien diferenciadas en el solar. En la zona alta del mismo -orientada al oeste-, donde ya se ha levantado la estructura de las gradas del emplazamiento deportivo, se han documentado dos estructuras de planta circular interpretadas como fondos de cabaña. "El resto de los fondos, que conformarían el hábitat del poblado, se situaría casi con toda probabilidad en el solar situado al oeste del Campo de Hockey", dice Vijande, justo donde está previsto comenzar a construir el segundo Punto Limpio de San Fernando el próximo verano, y cuyo control arqueológico podría ofrecer alguna que otra sorpresa de índole histórica.

En la zona intermedia se ha localizado un total de cinco estructuras circulares con un diámetro que oscila entre los 4 y 6 metros -dos de los cuales ya subyacen bajo las gradas del Campo de Hockey-, y cuya funcionalidad aún no ha sido descifrada. "Podría tratarse del área de almacenaje o de producción del poblado", señala el director de la excavación. Una información que, de momento, no va a ser posible contrastar, puesto que para superar los cuatro metros de profundidad alcanzados por el momento es necesario entibar los pozos. "Un proceso -añade Vijande- mucho más costoso y complicado".

En la parte media baja del solar -al este-, zona en la que se ubica la necrópolis del poblado, se han localizado 80 enterramientos, "una cifra que, de continuar la excavación, se podría multiplicar". El estado óptimo de conservación en que se encuentran los restos y la singularidad de los mismos es uno de los puntos más importantes del yacimiento. En concreto se han hallado enterramientos depositados directamente sobre el terreno, enterramientos situados en fosas con lajas de arenisca a modo de cubierta y enterramientos en fosas sin cubierta. Entre ellos destacan el que protagoniza una pareja abrazada bautizada como "los enamorados" o el de dos individuos enterrados conjuntamente en una estructura de unos dos metros de diámetros realizada a base de grandes lajas.

A su alrededor han aparecido otros cinco enterramientos de niños en forma circular y dos cúmulos de piedra orientados hacia el enterramiento principal. Remata el conjunto el anillo perimetral que les rodea, aún susceptible de ser analizado. "Sin duda se trataba de dos individuos muy importantes". Un dato que corrobora el ajuar encontrado en el interior, compuesto por hachas bien pulimentadas, un objeto cerámico y cinco agujas de hueso. A esto hay que añadir el pigmento color rojizo que se desprende de sus caderas, "que debía responder a algún rito mágico o religioso", puntualiza Eduardo Vijande. También está en fase de estudio la aparición de un corredor de acceso al enterramiento.

Todos estos elementos ya hablan de una sociedad clasista inicial, cuyo análisis podría avanzar datos de gran valor histórico para la provincia de Cádiz.