La Guardia Civil golpea de nuevo al cultivo ilegal de marihuana en la Sierra de Cádiz

La Guardia Civil de Cádiz ha intervenido nuevamente en la localidad de Villamartín una plantación de marihuana de 1.167 ejemplares. Un incendio provocado por el enganche ilegal al alumbrado público puso al descubierto dicha plantación que se encontraba oculta en el interior de la nave arrendada al empleado de una finca muy próxima al Hospital de Villamartín. Se ha detenido a dos personas, uno de ellos el dueño, por los delitos de tráfico de drogas y de defraudación de fluido eléctrico.

Un incendio dio la pista de la marihuana

El servicio se llevó a cabo durante la mañana del pasado día 24 en esta localidad serrana, cuando efectivos de Seguridad Ciudadana de esa localidad acudieron, junto a una dotación de bomberos, a un incendio provocado en una estancia situada en el interior de una finca y utilizada como cuarto de aperos y muebles viejos.

Tras sofocar el incendio los agentes descubrieron una instalación eléctrica y canalizaciones de aire similares a las utilizadas para los enganches ilegales al alumbrado público y compatibles con un posible cultivo 'indoor' de marihuana, que provenían de una nave anexa.

Por estos hechos, los agentes confirmaron sus sospechas al descubrir en el interior de dicha nave una plantación de marihuana compuesta por 1.167 ejemplares n estado de crecimiento que arrojaron un peso total de 66 kilos.

De este modo y, tras comprobar que se estaba cometiendo claramente un ilícito penal, los guardias civiles del Grupo de Investigación de Villamartín procedieron a realizar las investigaciones para la localización del autor o autores donde, en primer lugar, procedieron a la detención del trabajador que se encontraba arrendado para pernoctar en el interior de la finca, posiblemente, como encargado, entre otras cosas, del mantenimiento y custodia de dicha plantación.

Posteriormente y continuando con las indagaciones, se localizó y se detuvo al dueño y responsable de la finca, conocedora de todo el ilícito penal que se estaba cometiendo, tanto, en el cultivo ilegal como en la defraudación de fluido eléctrico que se situaba oculta en una torreta eléctrica contigua a la finca.

Por estos hechos se procedió a la detención de dos personas por los delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluído eléctrico. Del mismo modo se intervinieron 1.167 plantas de marihuana que arrojaron un peso total de 66 kilos. Los detenidos y la droga han quedado a disposición del Juzgado en funciones de Guardia de los de Arcos de la Frontera.

El peligro de los enganches ilegales

Hay que reseñar, en el caso que nos ocupa, que solo ha derivado en daños materiales, pero es importante advertir de los peligros que conllevan los enganches ilegales a la red eléctrica. Las modificaciones que se realizan en los sistemas eléctricos para llevar a cabo este ilícito penal multiplican el riesgo de graves incendios, que, en ocasiones, tienen consecuencias graves e irreparables para la vida de las personas. En este caso, hemos visto que la finca se encuentra situada a pocos metros de distancia del Hospital de Villamartín que da servicio a miles de personas de la Sierra de Cádiz, por lo que los daños personales y materiales que podría haber causado este incendio, de no haber sido por la rápida actuación de los profesionales, podría haber sido irreparable.