Los bomberos hallan el cadáver de una mujer muerta en su piso en Jerez

Los ladridos de su perro y el olor alertaron a los vecinos, que sospechan que pudiera llevar más de una semana fallecida

Los bomberos, ayer en Princijerez, cuando procedían a entrar en el piso.
Los bomberos, ayer en Princijerez, cuando procedían a entrar en el piso.
M. M. Jerez

15 de octubre 2016 - 05:01

Los bomberos del parque de Jerez encontraron ayer el cuerpo de una mujer sin vida en el interior de un piso de la urbanización Princijerez. Los hechos acontecieron a primera hora del mediodía cuando los vecinos, alertados por los ladridos de un perro, llamaron a los servicios de emergencia. Además, desde el piso en cuestión -el noveno 'D' del bloque 9 de esa urbanización- salía un olor a putrefacción que hacía pensar en lo peor. Fueron los bomberos los encargados de entrar en la vivienda. En un primer intento accedieron hasta la novena planta a través del ascensor, encontrándose con la tesitura de tener que echar la puerta abajo, algo de lo que desistieron ya que no tenían certeza de que la persona que viviera en el piso estuviera de viaje o, simplemente, fuera de su domicilio.

Fue entonces cuando solicitaron que el parque de bomberos enviara al lugar el camión autoescala, un vehículo con una grúa elevable con canastilla incorporada que es capaz de acceder hasta un séptimo piso, pero que si consigue acercarse lo suficiente al bloque (es decir, si no hay coches aparcados cerca y prácticamente se puede pegar al edificio) puede alcanzar hasta un noveno piso.

Así fue como los especialistas del Consorcio consiguieron acceder al balcón y encontrarse en el dormitorio principal a una mujer muerta y en avanzado estado de descomposición. Creen que llevaba más de una semana fallecida. La muerta, según los actuantes, parecía tener entre 50 y 52 años de edad, vivía sola en compañía de un pequeño perro que fue precisamente el que alertó a los vecinos con sus constantes ladridos.

Una vez terminado el servicio los bomberos procedieron a dar aviso al Cuerpo Nacional de Policía, que igualmente derivó el caso tanto al forense como al juez de guardia para que procedieran a determinar la naturaleza del fallecimiento (natural según los primeros indicios) y se levantara el cadáver para que fuera trasladado al Tanatorio de Jerez. El animal, tal y como sucede en estos casos, fue entregado a las autoridades municipales para su custodia temporal en las instalaciones de la perrera del polígono El Portal.

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