Un alcalde pedáneo de Jerez hace las labores de barrendero

El alcalde de la pedanía jerezana de San Isidro del Guadalete, Antonio Ramos, ha decidido partir en dos su jornada laboral para, desde las ocho de la mañana, ponerse "el mono de trabajo" y barrer las calles del pueblo "que están más sucias que la barriga de una mula". El veterano regidor asegura que estará con la escoba en la mano hasta las 12 de la mañana, momento en que volverá al Ayuntamiento "a trabajar de alcalde y a solucionar los problemas de los vecinos".

Afirma que donde más suciedad se acumula "es en las inmediaciones del colegio de la localidad. Cualquier día se nos pierde un niño por allí metido", refiriéndose a los montones de desperdicios.

Indica que el empleado que se ocupaba de estas faenas desde hacía ya quince años "cayó con el ERE municipal y mientras otras pedanías mantienen hasta cuatro y cinco personas en nómina, nosotros nos hemos quedado sin nadie. Y así no podemos seguir". También menciona la necesidad de hacer labores de poda "que se asumen por los propios ciudadanos" ante "la dejación de funciones del Ayuntamiento respecto a nosotros". El problema ha sido trasladado a la delegada de Medio Rural de Jerez "y de momento no ha hecho otra cosa que darme largas y no ha solucionado nada".