Rugulopteryx okamurae. Que seamos muchos los que sabemos escribir el nombre científico de un alga da una medida de su capacidad de fagocitación. El alga invasora asiática, que apareció por primera vez en las playas de Ceuta en 2015, se ha extendido a una velocidad que los especialistas consideran inaudita, convirtiéndose en un problema de urgencia en toda la zona del Estrecho de Gibraltar y en parte de la costa de Málaga.

Para tratar de paliar las pérdidas irreparables que causa esta especie exótica, distintos grupos de investigación –entre ellos, el Campus de Excelencia Internacional Global del Mar, el Instituto de Biotecnología y Desarrollo Azul-IBYDA de la Universidad de Málaga, el Instituto Español de Oceanografía, el Clúster Marino-Marítimo de Andalucía, la Cátedra de Ciencias del Litoral de la Universidad de Málaga y la asociación Equilibrio Marino– se han unido para formar el Foro Alga Invasora. Esta agrupación de entidades articula al tejido investigador científico-técnico, al cuerpo empresarial y productivo, y a organizaciones ciudadanas y de conservación de la naturaleza, ofreciéndose a las administraciones públicas locales, autonómicas y estatales para asesorar a corto y medio plazo en la gestión y control de la invasión de Rugulopteryx okamurae. Cabe recordar que incluso la declaración del alga asiática como especie invasora está a la espera de varios trámites. 

Desde su aparición, recuerdan los especialistas, el alga parda asiática se ha expandido por las costas andaluzas desde Cabo Roche, en Cádiz, hasta Marbella, en Málaga (con presencia todavía puntual en las provincias de Granada y Almería), produciendo importantes impactos sobre la biodiversidad, la integridad de los ecosistemas marinos y las actividades económicas asociadas. En la actualidad, está afectando muy gravemente a los ecosistemas marinos de Parque Natural del Estrecho, y está empezando a colonizar otro espacio natural protegido como es el Paraje Natural de Maro-Cerro Gordo. 

El Foro Alga Invasora se da a conocer la misma semana en la que el Gobierno español ha alertado a la Comisión Europea (CE) de que la propagación del alga asiática ha generado un impacto económico millonario que amenaza con “aumentar exponencialmente” conforme crezca el área colonizada, algo que sucederá puesto que “se desconocen métodos de control efectivos que pueden aplicarse en la etapa actual de invasión”. También hace unos días se conocía que la proliferación de la Rugulopteryx okamurae comienza a dar problemas en el sector de la almadraba en Tarifa, que reconocen que este año están encontrando una mayor cantidad de algas. En la almadraba de Conil, el peso de las algas ha llegado a romper las redes. Los pescadores del voraz en el Estrecho también arrastran algas en sus capturas.

Entre las propuestas, se encuentra el promover acciones para la extracción de la especie

El plan del Foro Alga Invasora contempla, entre otros puntos, realizar acciones encaminadas a un mayor conocimiento científico de la invasora, con el fin de reducir su impacto ambiental en el medio costero; además de actuaciones dirigidas a la prevención y alerta temprana de otras especies invasoras, como pueden ser la reducción de vectores de transmisión, en concreto, el tratamiento efectivo de las aguas de lastre que generan el tráfico marítimo o la acuicultura.

También, desde la plataforma se propondrán acciones para la extracción selectiva de la especie invasora, y para la eliminación y valorización de la biomasa; así como medidas encaminadas a un mayor conocimiento de la problemática socio-ambiental y su gestión integrada. Por último, se propone desarrollar una agenda de actuación y de sensibilización dirigida a las administraciones públicas.

Aunque el Foro Alga Invasora nace como consecuencia de la invasión de Rugulopteryx en la costa andaluza, la iniciativa surge también con vocación nacional e internacional, pretendiendo servir de modelo para otras costas españolas y europeas, pues la proliferación de especies invasoras es un fenómeno transfronterizo asociado al cambio global y a la intensa conectividad entre todos los países a escala mundial.